Las malas políticas del Gobierno federal, encabezado por Andrés Manuel López Obrador, han sumido a los ciudadanos de Quintana Roo y del país en un bajo poder adquisitivo, que los deja cada vez más alejados de poder adquirir los productos básicos para su supervivencia, debido al incontrolable aumento en los precios de los insumos del hogar.
Las empresas tampoco se libran de este problema; la inflación no sólo afecta sus ventas por el bajo poder adquisitivo de los consumidores, sino que también encarece los insumos para la producción, lo que las obliga a reducir los salarios ofrecidos a sus empleados.
Las malas políticas del Gobierno federal han sumido a los ciudadanos en un bajo poder adquisitivo, incapaces de adquirir lo básico para sobrevivir debido al incontrolable aumento de precios.
Se trata de un círculo vicioso: los altos precios de la canasta básica impiden a los ciudadanos, que son también empleados, adquirir lo necesario para una vida digna, lo que disminuye las ventas.
Esto empuja a los empresarios a ofrecer bajos salarios, y aunque haya trabajo, será mal remunerado, sin prestaciones sociales adecuadas. La inflación incontrolable es consecuencia de las malas políticas del Gobierno federal, que no ha emprendido acciones para frenarla.
Según datos del Inegi, en el último año, el Índice de Precios al Productor ha superado el 12 % en algunos sectores.
La inflación ha golpeado particularmente a la industria alimentaria, con un incremento del 12.13 %, a la industria del papel, con un 12.29 %, y a la industria de bebidas y tabaco, con un 10.06 %.
En Quintana Roo, las ciudades de Cancún y Chetumal han vuelto a figurar en la lista de las que presentan los mayores incrementos de precios en todo el país. Durante la primera quincena de agosto, Cancún ocupó el tercer lugar con una variación del 0.44 %, mientras que Chetumal registró un aumento de precios del 0.22 % respecto de la quincena anterior.
El alza de precios en productos básicos como el limón, la calabacita, la electricidad y el huevo, entre otros, golpea más fuerte a las clases media y baja, quienes día a día enfrentan mayores dificultades para alimentar a sus familias. El dinero vale cada vez menos, y la inflación es una carga insostenible para quienes menos tienen.
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