En nuestro, país la ley electoral vigente establece que se debe respetar la equidad de género en el ámbito político y democrático, por ende, todos los partidos políticos deberán postular candidatas a los diferentes cargos de elección popular de manera proporcional, sin embargo, lo que se hacía antes, era proponerlas como candidatas en los distritos con menor número poblacional, o en los lugares donde se consideraba perdida la elección.
Con base en esto, el Instituto Electoral del Estado de Querétaro (IEEQ), en la Sesión del Consejo General que se llevó a cabo el pasado 13 de abril, expuso ante los representantes de los partidos políticos su propuesta de reforma a la Ley Electoral del Estado, cuyo punto central es el criterio de equidad poblacional, es decir, que obligaría a los partidos a postular mujeres en tres de los seis municipios de mayor densidad poblacional (Querétaro, San Juan del Río y El Marqués). Con esto se buscaría armonizar la legislación local con la nacional. Se espera que en los próximos días se convoque a sesión a la Comisión Jurídica del IEEQ para votar el proyecto y turnarlo al Congreso local para su aprobación. (Plaza de Armas, 14 de abril de 2023). Aunque aún no se ha aprobado, se está trabajando en ello.
Me parece importante este hecho porque está muy bien que se tomen en cuenta a las mujeres, pero lo que no estaría bien es que por cumplir con este precepto ahora resulte que se lance a una mujer a asumir una gran responsabilidad que es gobernar un estado, o un municipio o desempeñar la función de legislar a favor de las grandes mayorías y que no tenga la capacidad para hacerlo, o simplemente que no tenga el liderazgo, el arraigo entre los que dice representar. Ese es precisamente uno de los graves problemas que sufre nuestro sistema electoral democrático, que los representantes populares los promueven los partidos políticos, las cúpulas, y no sus representados, resulta que son unos verdaderos desconocidos que carecen del respaldo popular.
Así sucede con todos los candidatos de los distintos partidos políticos, sean hombres o mujeres, no se apegan a los principios de elegir al mejor, al más preparado y culto, al más trabajador, al más carismático, al más sensible, al que ha demostrado con hechos que es un verdadero líder de masas, repito sea hombre o mujer.
Hoy vemos en los medios de comunicación, principalmente en las redes sociales, como se han lanzado muchos políticos y funcionarios públicos de diversos colores, saliendo a las calles y tomándose la foto en jornadas multidisciplinarias, entrega de escrituras, apoyo a los comerciantes, apoyos a la vivienda, becas, tocando puertas para entregar recibos de agua, informando al ciudadano que gracias al gobierno, se bonificaron 500 pesos a su favor por la falta del servicio que sufrió en el mes de diciembre (a propósito no fue en todas las colonias, faltó la Melchor Ocampo, en San José El Alto); haciendo recorridos para demostrar que están preocupados por la situación tan precaria en la que vive la gente, y así podríamos enumerar un sinfín de cosas; es verdaderamente comprensible que precisamente en los tiempos en que se avecinan procesos electorales mujeres que se ve que nunca salen de la oficina ahora se conviertan en mujeres de campo; es molesto que cuando vas a su oficina a exigir solución a los problemas de la gente simplemente no te atiendan. Esas mujeres que no tienen la sencillez, la humildad de atender y resolver los problemas que padece la población no deberían ser propuestas por sus partidos para ejercer más cargos públicos.
Está en manos de la ciudadanía reflexionar ese tipo de acciones, esto que no es nuevo, se repite cada vez que se presentan los tiempos en que hay que elegir a las nuevas autoridades. Como decimos los de abajo, solamente se acuerdan de nosotros cuando nos necesitan.
El año 2024 está a la vuelta de la esquina, en Querétaro se tiene que elegir 18 nuevos ayuntamientos, cinco diputaciones federales, dos senadores y el congreso local. Es hora de reflexionar mi humilde opinión es que somos el pueblo quienes debemos determinar quiénes estarán al frente de nuestros municipios y de nuestro estado representado en las cámaras por otros tres años, debemos evaluar cada una de las propuestas, su actuar cotidiano y no importar si es hombre o mujer, pero que sean personas comprometidas con el pueblo y que tengan la capacidad de resolver los problemas.
No queremos más promesas, queremos soluciones. Si queremos una solución de fondo, una vez más hacemos el llamado a formar un nuevo partido que represente los intereses de las clases más vulnerables de nuestro estado.
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