El filósofo y jurista francés Montesquieu afirmó que "no hay peor tiraría que la que se ejerce a las sombras de las leyes y al calor de la justicia", frase que queda como anillo al dedo para señalar la manera errática, tirana y engañosa como ejercen el poder los de la 4T aunque el pueblo ya los llama los de la Transformación de cuarta y con justa razón.Bajo las sombras de la ley y con el pretexto de ejercer justicia, hoy el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha emprendido una feroz cacería contra todo aquel individuo, político, empresario o periodista, que se atreve a cuestionar o señalar los errores que comete y que hunden al país en la peor crisis económica y de salud que se recuerde en la historia.
Con el pretexto de terminar con todo lo malo del país, al presidente López Obrador poco le importan los modos y arremete, con el argumento de aplicar una justicia que exige el pueblo, contra todos y los señala de ser los causantes de lo malo que se vive en México.Con esa errónea política el mandatario desapareció programas asistenciales que beneficiaban a los más pobres y a los más necesitados, hoy, en cambio, regala con un claro sentido de cautivar voluntades, el dinero de todos los mexicanos que pagan impuestos, dinero que antes y a través del Ramo 23 en el presupuesto federal se destinaba a obras de beneficio colectivo y de desarrollo de los pueblos.
Hoy vemos con preocupación la manera errónea como se ha tratado la pandemia de covid-19 y como el mandatario ha manipulado la información para tratar de esconder las cifras reales de cómo afecta a nuestro país el virus.Una política errónea de prevención, malos funcionarios para emprender acciones para frenarlo provocaron las inverosímiles cifras de muertos y contagiados, y a pesar de ellos, el Gobierno Federal, se cerró a apoyar, con un programa alimentario emergente a las familias que resintieron más esa pandemia, a los que se quedaron sin trabajo, a los que no pueden llevar dinero ni comida a sus casas, a los que tuvieron que enterrar a sus familiares.
Esa desatención permeó en todos los que hoy tienen el poder y que emanan del partido del Presidente, de Morena, que en Quintana Roo están representados por los alcaldes de Benito Juárez, Solidaridad y Othón P.Blanco, los que prefirieron ignorar el sufrimiento de miles y frenar la ayuda que bien pudieron dar a los miles de familias en problemas.Estos malos funcionarios incluso han sido denunciados, exhibidos; se les ha comprobado el mal manejo de los recursos, las irregularidades que han cometido, cómo se benefician, pero contra ellos no hay acción legal.No, ellos tienen el manto protector de pertenecer al partido de la "Cuarta Transformación", el del presidente que fustiga a sus críticos y que protege a los corruptos, a los que abandonan a otros institutos políticos para refugiarse ahí y evadir castigo a sus malas e ilegales acciones.
En la penitencia llevarán el castigo, ya está muy cerca el proceso electoral del 2021, el pueblo no es tonto y se ha dado cuenta que Morena no significa el verdadero cambio al que aspiran, por el contrario, es un partido político más que protege y encubre a los corruptos, a los malos gobernantes, que pelea el poder sólo para sus propios intereses, no para que sus gobernantes saquen de la pobreza a los más de 90 millones de pobres.
Por todo lo anterior, se vuelve necesario crear un bloque de oposición conformado por obreros, campesinos, comerciantes y empresarios; amas de casa, profesionistas y estudiantes para unirnos y de manera democrática, evitar a toda costa que López Obrador y sus sequitos lambiscones continúe ejerciendo control sobre los otros poderes de la nación, asimismo crear las condiciones para que el pueblo organizado conquiste el poder de la nación.La tarea es grande, pero no imposible.
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