Este fin de semana serán inaugurados el Tren Maya y el Ie-Tram, dos sistemas de transportes que fueron vendidos al pueblo por parte del presidente Andrés Manuel López Obrador y el gobernador Mauricio Vila como importantes para la movilidad de la región y detonantes para el desarrollo de las comunidades indígenas y en general del pueblo. ¿Es esto cierto? Veamos.
Ambos transportes fueron anunciados como una alternativa de movilidad para el pueblo del sureste. En el caso de los yucatecos, tendrán el Ie-Tram, mientras que el Tren Maya recorrerá varios kilómetros, cruzando entidades de Yucatán, Quintana Roo, Campeche, Tabasco y Chiapas.
Sin embargo, sus costos no están al alcance de la economía de los mexicanos, sobre todo del Tren Maya. Aunque los boletos se acabaron en cuestión de minutos, fue por lo novedoso de este.
A pesar de que el presidente López Obrador señaló que los boletos del Tren Maya iban a estar económicos, que por varios meses fue una incógnita su costo, hoy lo conocemos, y será más caro que viajar en autobús.
De acuerdo con el sitio de venta en línea de boletos e-Ticket los costos en Clase Turista son de mil 166 pesos y en Premier, mil 862 pesos; un costo elevado para una familia yucateca que vive al día, por lo que podemos concluir que serán justamente ellos los que no podrán acceder a este transporte, a pesar que se dijo, en justificación para su construcción, que sería para el uso del pueblo.
Los boletos puestos a la venta el pasado viernes 1 de diciembre, son de la ruta que va desde la Estación San Francisco Campeche hasta Cancún, Quintana Roo, cuyo primer viaje de esta obra tan polémica saldría el 16 de diciembre a las 7:00 horas desde Campeche con destino a Cancún.
No obstante, en la construcción de ambas obras, tanto del Tren Maya como el Ie-Tram se ven los intereses económicos de por medio, dejando de lado la necesidad de la población vulnerable, que si bien brindó trabajo mientras se construía hoy vemos que el pueblo será el que no usará estos transportes, sobre todo el Tren Maya, pero no porque no quieran, sino por los altos costos que representaría.
Pero ¿por qué digo que este transporte no será para uso del pueblo como tanto se pregonó? Por el simple hecho que, de preferir pagar un viaje en Tren Maya, sería quitarse el pan de la boca, porque tiene que elegir entre viajar en este transporte “novedoso” o comprar para comer, si hablamos que los salarios son muy ajustados y que apenas si alcanza para acceder a la canasta básica. Pues de acuerdo con reportes de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec) el precio promedio semanal de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) fue de mil 795.90 pesos, un aumento promedio de 20.32 pesos.
Es completamente inaccesible para los más pobres, pero sobre todo, para quienes viven en la Península es complicada, entonces vemos que a todos se nos vendió un transporte económico, accesible para todos y de calidad y que serviría para la buena comunicación de este lado de México, pero vemos que al menos en lo económico no lo es.
¿Por qué digo que este transporte no será para uso del pueblo como tanto se pregonó? Por el simple hecho que, de preferir pagar un viaje en Tren Maya, sería quitarse el pan de la boca.
El transporte “innovador” de Mauricio Vila Dosal, el empresario que se volvió gobernador y que seis años ha gobernado para su grupo, es uno de los transportes que cambiaría la movilidad de la gente; bueno, al menos así nos platicaron a los yucatecos: que este transporte autosustentable vendría a completar ese cambio.
Su construcción fue polémica, en primer lugar, por el préstamo que pidió al Congreso local, donde todos los yucatecos estaremos pagando y, en segundo lugar, la inconformidad de los vecinos al ver una plancha de cemento afuera de sus viviendas cuando antes tenían áreas verdes. La inversión, de acuerdo al gobierno, para este transporte fue de dos mil 820 millones de pesos, donde el Gobierno del estado dispuso del 61 por ciento, el Gobierno federal el 23 por ciento, y la iniciativa privada el 16 por ciento para la instalación de este medio.
Sí, en Yucatán se le está invirtiendo mucho pero no para sacar de la pobreza a sus habitantes, los mandatarios federal y estatal se jactan de trabajar para el pueblo pero en los hechos no es así; el federal dice ser el Gobierno para los pobres y son estos a los que más ha ignorado, el segundo sólo los ha ignorado, sobre todo aquellos que se han organizado en el antorchismo para luchar y tener mejores condiciones de vida, que a pesar de que lo han ido a visitar al Palacio de Gobierno, no los han recibido.
Los gobiernos y el sistema actual no están viendo por el pueblo, sólo ven y gobiernan para sus intereses, por ello llamo a todos los yucatecos y al pueblo en general a que nos unamos, que no bajemos la guardia que luchemos hasta cambiar la situación de nuestro estado y del país que, de las filas del pueblo, alguien de verdad nos represente y vea por el cambio en serio que necesitamos. Los de hoy han mostrado que no saben gobernar.
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