El agua dulce es vital para la vida terrestre. En aquellos lugares donde se escasea podemos ver imágenes semejantes al mismo infierno. Durante años nos han advertido del peligro y el caos que se provocaría si el agua dulce no cubriera la demanda de la humanidad, bajo esta premisa el sistema nos ha educado en el cuidado gota a gota del agua y de su consumo óptimo. De este modo es condenable por la misma sociedad el que un ciudadano desperdicie o exceda su uso.
Evidentemente, la escasez de agua que azota al país no se debe al desperdicio o mal manejo del recurso. Ciertamente mucho tiene que ver el cambio climático que es causado por los grandes emporios mundiales industriales que con las grandes emisiones de carbono generan el efecto invernadero, causando sequías como la que este año ha afectado incluso a nuestra entidad tlaxcalteca. Visto de este modo, el problema solo se puede menguar de manera mundial. Sin embargo, los gobiernos pueden y deben tomar acciones para prevenir problemas como los que hemos visto en Nuevo León.
En Tlaxcala existe un importante asentamiento industrial del cual poco se sabe sobre el consumo de agua, cuantos litros usan, que concesiones tienen con el gobierno y a qué costo, a donde van sus aguas negras y si son tratadas. Según la Secretaría de Economía, el estado cuenta con 11 parques industriales: Ciudad Industrial Xicohténcatl l Tetla, Ciudad Industrial Xicohténcatl ll Huamantla, Ciudad Industrial Xicohténcatl III Tlaxco, Corredor Industrial Malinche, Corredor Industrial Apizaco – Xalostoc – Huamantla, Corredor Industrial Panzacola, Parque industrial Xiloxoxtla, Parque Industrial Ixtacuixtla, Parque Industrial Calpulalpan, Zona Industrial Atlangatepec y Zona Industrial Velazco.
Ha habido señalamientos directos de la población hacia las empresas, como causantes de la falta de agua en localidades. En el diario MILENIO el 29 de junio del año pasado publicó una nota en la que se lee: “Más de 24 horas se han cumplido de la manifestación de San Luis Apizaquito, municipio de Apizaco, los pobladores denuncian escasez de agua y culpan a la refresquera Coca-Cola de la extracción en exceso generando ausencia del vital líquido en los mantos acuíferos”.
La Jornada de Oriente, del 8 de diciembre de 2019 título una nota: “En Tlaxcala crece la industria alegremente sin monitoreo real de descargas tóxicas: expertos”, y dice en su contenido que “Tlaxcala es uno de los estados más dinámicos en materia industrial en México, donde las empresas crecen alegremente sin ningún monitoreo real de las descargas tóxicas en la cuenca Zahuapan-Atoyac”.
Es curioso que Tlaxcala aparezca en la lista de estados con más problema de abasto de agua en el país, puesto que la geografía del estado y el medio ambiente no son los mismos que los estados del norte, además de que su población es baja, rebasa apenas el millón de habitantes, si lo comparamos con Ciudad de México o Nuevo León. El abasto, la distribución y el saneamiento del agua que extraemos de nuestras cuatro cuencas acuíferas y de arroyos naturales merece la atención urgente por parte de nuestras autoridades.
Las manifestaciones en Panotla, Huamantla, Apizaco, Tlaxcala y en algunos otros municipios son solo la punta del iceberg, es necesario que todos los tlaxcaltecas tomemos conciencia de la gravedad del problema y sumemos acciones para que exigir al gobierno una planeación del manejo, distribución y uso del agua, no tolerar la contaminación de ríos, arroyos y lagunas, no permitir la tala de nuestros bosques, invertir en nuevas acciones para no dejar todo el abasto a los mantos acuíferos, no descuidar el desperdicio de agua en sistemas de riego, reducir al mínimo las fugas en tuberías de agua potable; exigir pues, un plan hídrico integral que redireccione el rumbo del futuro catastrófico que pueden sufrir nuestros hijos.
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