Nicolás Romero, México.- Con una pequeña convivencia en la que compartieron la tradicional rosca de reyes, activistas del Movimiento Antorchista e integrantes del pleno de la colonia Juan Manuel Celis Ponce, en Nicolás Romero, Estado de México, entregaron los juguetes que dejaron los Reyes Magos a los más pequeños de la comunidad.
Lo anterior, debido a que el año que terminó fue difícil para la mayoría de los mexicanos, especialmente en el aspecto económico por el incremento en el precio de los productos de primera necesidad, lo que provocó que diciembre se convirtiera en el mes más caro de todo el año, debido a que, en él, se concentran fechas especiales que el pueblo mexicano acostumbra a celebrar y requieres de recursos económicos.
A pesar del difícil panorama económico y político, el responsable del trabajo antorchista de esta colonia, el activista Juan Ángel López, no se atemorizó ante el reto de organizar a sus habitantes para que juntos tengan la posibilidad de enfrentar satisfactoriamente las adversidades. Su juventud no es un pretexto para no comprender que sólo con la unidad y la voluntad de los vecinos, con su trabajo solidario en beneficio de la colonia, es como lograrán superar las carencias que en este momento padecen.
Por esta razón, siempre en coordinación de los integrantes del pleno de la colonia, se organizan para realizar gestiones y peticiones a las diferentes instancias de gobierno, para que ellas, en función de su responsabilidad, atiendan y resuelvan las carencias en los servicios públicos. Al mismo tiempo, también asisten a las diversas instituciones privadas con el propósito de conseguir apoyos como en este caso, los juguetes, que fueron entregados a los niños de la colonia y que, por lo menos, les harán pasar momentos agradables tan necesarios frente a la dura realidad del entorno en que viven.
Sin perder el entusiasmo, el activista de la colonia, tiene presente que estos apoyos no resuelven de fondo el problema de la pobreza, que el verdadero fin de las penalidades de todos los humildes será cuando se logren romper los viejos cimientos sobre los que se sostiene el capitalismo y sobre ellos se construya, con el esfuerzo de todos, una sociedad más humana.
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