El día 15 de julio del presente, el presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer en su programa conocido como “mañaneras” que el regreso a clases presenciales sería general, a finales del mes de agosto; es decir, que para dar inicio al ciclo escolar 2021-2022. Lo dicho por el mandatario fue lo siguiente: “Se reinician las clases a finales de agosto en todo el país, hay condiciones para eso y ya estamos trabajando en el plan para mejorar las escuelas, porque han estado abandonadas durante mucho tiempo. Crear las condiciones básicas para el regreso a clases presenciales, puede quedar como una opción, sí, como opción, como alternativa, para no negar la posibilidad a los que no quieran regresar, porque también una cosa es decir vamos abrir las escuelas y otra cosa es vamos por la fuerza a abrir las escuelas, no, por la fuerza nada, es convencimiento, cuando iniciemos será general, no vamos a tener para entonces problemas de contagios que puedan poner en riesgo a los niños, a los jóvenes, a maestras a maestros, al personal educativo”.
Esta declaración sobre el regreso a clases presenciales es preocupante por las siguientes cuestiones: 1) Dice que tenemos condiciones para hacerlo, pero no se dan a conocer esas condiciones, porque no las hay, existen escuelas que no cuentan con los recursos básicos como el agua y las que están en malas condiciones de infraestructura, la economía de los padres de familia no alcanza para abastecer a las escuelas de agua, gel antibacterial, jabón, y productos de limpieza que eviten la propagación del Covid-19. 2) No se ha dado a conocer ningún plan nacional, para mejorar las escuelas, porque seguramente tampoco lo hay. 3) Menciona el regreso como alternativa, ya que, si no hay condiciones y no hay apoyo a los padres y madres de familia, a las escuelas y a los maestros, es lógico que estos mismos se opondrán al regreso. 4) Está claro que no hay que abrir las escuelas a la fuerza, pero sí hay que generar las condiciones para que se haga un regreso a clases seguro, para que esto suceda, nuestros estudiantes tienen que estar vacunados contra la covid-19. 5) Que para entonces no vamos a tener problemas de contagios, pero si solo se ha vacunado al 32.72% de la población, habrá contagios y por lo tanto decesos.
Estos y más aspectos deberían de ser considerados por el presidente, antes del regreso a clases, ya que mandar a nuestros estudiantes a que lleven a cabo clases presenciales, sin estar vacunados, a las aulas y escuelas que no cuentan con lo necesario para que no se propague la covid-19 sería una irresponsabilidad, por parte del gobierno actual, de la Secretaría de Educación y de la Secretaría de Salud, arriesgar a los maestros y alumnos a un regreso forzado sin antes haber recibido la vacuna contra este virus mortal.
Es cierto que, debido a la pandemia, la educación se deterioró aún más y la deserción escolar aumentó. Que es necesario mejorar la forma de llevar educación a los estudiantes, ya que necesitan aprender. Los maestros, directivos, padres, madres de familia y alumnos nos oponemos a esta injusticia que se comete en contra de la salud de nuestros hijos y de nosotros. El regreso a clases presenciales, debe de ser seguro para todos.
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