Carlos Návez Luis, dirigente del Movimiento Antorchista en el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG) señaló, los derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) enfrentan serios problemas en los hospitales del IMSS ubicados en el AMG. Personas que tienen acceso al servicio de salud público, entre ellos algunos antorchistas de la colonia Fraternidad del municipio de Zapopan, sufren por falta de medicamentos para ser atendidos de algunas enfermedades como el cáncer y sus familiares gastan 10 mil pesos o más para poder adquirir los fármacos en el sector privado.
El líder social destacó, esta situación es grave, pues pese a que el presidente Andrés Manuel López Obrador prometió que desde el primer año de su gobierno los mexicanos íbamos a tener un sistema de salud mejor que el de Dinamarca o Suecia, a menos de un año para que deje el poder y se vaya de Palacio Nacional, los nosocomios del IMSS e ISSSTE de la ciudad de Guadalajara, además de desabasto de medicamentos, presentan fallas en elevadores hasta problemas de suministro de agua potable, con lo cual el servicio de salud público en la capital del estado de Jalisco, es cada vez más deficiente.
Pero, también hay otro punto crítico. Los servicios públicos de salud se han vuelto inaccesibles para los jaliscienses que viven en los municipios que conforman el AMG y no cuentan con un empleo formal, no tienen un salario fijo o su salario corresponde al mínimo. Návez Luis refirió, según el Coneval el municipio de Guadalajara registra 392 mil 113 personas sin acceso a servicios de salud; Tlajomulco de Zúñiga, 239 mil 756; Tlaquepaque, 222 mil 090; El Salto, 79 mil 505; Zapopan, 498 mil 124 y Tonalá, 219 mil 728.
Frente al lamentable panorama, el dirigente antorchista llamó al pueblo de Jalisco a que no se deje engañar, ya que si López Obrador realmente estuviera interesado en crear el “mejor sistema de salud del mundo”, tuvo que haber destinado el mayor presupuesto del mundo para garantizar salud pública eficiente y con acceso para todos los mexicanos, pero en los hechos se está viendo todo lo contrario y la promesa de un sistema de salud mejor que el de Dinamarca o Suecia, es demagogia barata, incluida la “megafarmacia” para acabar con el desabasto de medicamentos.
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