Quizá mi esfuerzo y mis pocas luces, de poco sirvan en la vida política de nuestra entidad, en gran parte, por el reducido impacto que las opiniones disidentes tienen en una sociedad controlada por los medios que son, en realidad, empresas con líneas editoriales supeditadas a los convenios de sus contratantes.
La realidad del oaxaqueño es esta: la inflación pega con más dureza que en la mayoría de los estados, por el difícil acceso a la accidentada orografía; la falta de industrialización y el monopolio de las grandes cadenas comerciales; el gobernador saliente anunciando en el país y en el extranjero las bondades de un modelo de desarrollo en la entidad, que muy pocos ven y que a muchos excluye; con una administración pública plagada funcionarios negligentes, insensibles y con reducida seriedad al frente de su cargo, que están por dejar sin solución varias obras, conflictos comunitarios y problemas sociales;
No se está transformando nada, hay un cambio de poder en el estado y se está realizando una batalla campal entre los contendientes de Morena por el poder, que, a pesar de no ser elecciones por partidos, en los hechos estos impulsan a sus candidatos con las mismas viejas mañas, pero en algunos casos potenciadas.
Las terribles expectativas de que el próximo año habrá menos recursos para que los oaxaqueños accedan a obras y servicios básicos. Los poderes mediáticos y todos aquellos que se ofrecen al nuevo gobernante, preparan el terreno con sus argumentos contra las organizaciones y las manifestaciones.
“En la congeladora regulación de marchas y manifestaciones en Oaxaca” (Portal Primera Línea, 23 de septiembre 2022). Para el diputado del PAN, Leonardo Díaz Jiménez, los líderes de agrupaciones sociales se han “prostituido” y se mueven sólo por el interés económico, por lo que urgió regular las protestas en Oaxaca para evitar bloqueos y manifestaciones que sólo afectan a las y los ciudadanos de la entidad.
Lo anterior, al recordar que presentó una iniciativa para regular las marchas y plantones en la entidad, pero lamentó que su propuesta se encuentre prácticamente en la congeladora de la comisión permanente.
“Nosotros como grupo parlamentario del PAN, hemos insistido desde hace más de un año, que Oaxaca necesita regular ese tipo de situaciones para El Progreso de la economía, pero sobre todo de la organización del estado”. Aclaró que no está en contra del derecho a la manifestación, pero sí en frenar tantas protestas y bloqueos para evitar no afectar a los ciudadanos que son los más perjudicados.
“Los engendros del gobierno” editorial de El Imparcial. Hace poco más de una semana, la ciudadanía de la capital, distritos y municipios conurbados, vivimos un infierno de atropellos, amenazas y hasta violencias a nuestros derechos civiles. Ya se ha convertido en una institución conculcar el derecho a la libre circulación, sin que autoridad alguna mueva un solo dedo para restituir nuestras libertades.
Un grupo de organizaciones sociales o de membretes, además de vecinos de algunas comunidades, maestros e indígenas triquis, montaron decenas de bloqueos, aparte de la toma de casetas de peaje, carreteras e importantes vialidades y el acceso al aeropuerto. El sitio a la capital se prologó por cerca de tres días.
Pero, ¿Cuál fue el fondo de este chantaje? Decenas de organizaciones parasitarias de la dádiva gubernamental, acostumbradas a este método, exigían recursos millonarios. Cada uno de los dirigentes traía ya su cifra. La pregunta es, ¿Y quién ofreció tales sumas del erario que se presume es dinero del pueblo?
Todos se preocupan por los derechos de los ciudadanos, de los oaxaqueños, pero nadie dice nada acerca de quienes tienen que buscar refugio en una organización, cooperar para sus gestiones y múltiples visitas para solicitar soluciones, más tarde otras tantas para obtener compromiso de los funcionarios y, finalmente, la radicalización con marchas, plantones y bloqueos para que se cumpla la palabra empeñada. Y qué se dice de quienes ven afectada sus vida diaria, su trabajo, sus actividades en el hogar para venir a hacer efectivo el acceso sus derechos constitucionales. ¿Cual es la defensa para ello?, ¿A quién recurrir?, ¿Quién castigaría a los funcionarios omisos?, ¿Como es que se le da dinero a los líderes, y no hay forma de auditar y garantizar que las obras se hagan por quienes deben hacerlas y comprobarlas?
Del hecho de que quienes hoy gobiernan sean parte importante de la forma de lucha de las actuales organizaciones, e incluso éstas sienten que sus compañeros de lucha están ahora en el poder y van a llover soluciones y desarrollo, es un error de juicio, Morena es el gobierno más neoliberal de nuestra historia, esto significa que es el más eficiente en la aplicación del planteamiento de dejar a la población que vivía del producto de su fuerza de trabajo únicamente y que el Estado acabe con el paternalismo que ha hecho a los ciudadanos que solo se conciban como receptores de beneficios, por lo tanto, se les aplicará por igual el papel de intermediarios hayan sido o no aliados en épocas políticas pasadas. El tiempo lo dirá.
Ante este escenario, los millones de pobres, que son la mayoría de habitantes en esta entidad, deben conocer la forma de defenderse…La mentira de los usos y costumbres y el difícil acceso al poder de las comunidades.
Ahí viene López Obrador otra vez y hay una pasarela de los personajes encumbrados en Morena, que andan regalando lentes, despensas y promesas, como siempre, en plena campaña, otra vez como siempre, a pesar de que el proceso electoral acaba de pasar.
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