El precio de la vivienda en Baja California incrementará entre 10 y 15% respecto al año pasado, derivado del encarecimiento de la tierra, y particularmente de insumos como el acero y el concreto, estimó Alejandro Jiménez, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi).
“En enero 2020 el acero costaba 10 pesos el kilo, 10 mil pesos la tonelada, ahora ronda los 20-25 pesos por kilo. Se fue al doble. En 2022 las principales cementeras incrementaron entre 15 y 20% sus precios”, refirió el empresario, quien comentó que, en ciudades como Querétaro, en el centro del país, se registra un alza de la vivienda del 20%. Señaló que sólo es posible construir vivienda de interés social, para la mayor parte de los acreditados del Infonavit, que tienen acceso a créditos de hasta 350 mil pesos, si se da una sinergia entre iniciativa privada y los gobiernos estatal y local.
Para ello, se está en pláticas con funcionarios de la Sidurt, para ver cómo se puede habilitar tierra de los desarrolladores con infraestructura por parte del gobierno del estado y/o poder utilizar los bancos de tierra del gobierno del estado.
Así de rápido crece el costo de vivienda, por un lado, los grandes capitales exigiendo mayor ganancia y por el otro lado aumenta el número de pobres que cada vez se han más pobres y que las posibilidades para poder adquirir una vivienda llegan casi a 0. Nuestra organización ha planteado desde hace ya varios años un programa que dote de vivienda popular a familias de escasos recursos económicos, que tenga posibilidades de pagar a módicos precios estas viviendas y que, en efecto, tenga la posibilidad de está aportando, como cualquier mexicano, a la economía del país.
En baja California la vida es todavía más cara que en el sur del país, esto principalmente por la cercanía que tenemos con Estados Unidos, pero aquí el déficit de vivienda también es alto, solo cifras oficiales señalan que hay poco más de medio millón de viviendas faltantes, así lo declara un el encargado de la vivienda en el estado. Saúl Osnaya López, “Tenemos un rezago del 40 por ciento, estamos haciendo una planeación y políticas públicas, no queremos engañar a la gente; la gobernadora presentará el programa en los próximos meses, con vivienda popular y bajo costo”, de acuerdo con el censo de población y vivienda del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, actualmente hay 475 mil viviendas con rezago en Baja California, lo que representa un millón 600 mil personas. Además, hay 200 asentamientos populares en zonas irregulares a nivel regional.
El problema se agrava cuando vemos que se estima que son poco más de 38 mil viviendas abandonadas en todo el estado, con el 90 por ciento de las mismas ubicadas en Tijuana y Mexicali, expuso la delegada del Infonavit en Baja California, Ana Lizeth Gómez.
La funcionaria aclaró que calcular esta cantidad resulta inexacto ya que puede haber viviendas del Infonavit cuyo crédito esté siendo pagado y simplemente no estén siendo habitadas, o bien, estar abandonadas, pero ser parte de un crédito bancario.
Por un lado la necesidad y por el otro el abandono de las vivienda, la cuesta de enero fue pesada, algunos todavía no salimos de ella, pero falta la cuesta y la inflación que se pronostica, quienes más la sufren, como siempre, somos los pobres, que apenas y tenemos para vivir el día a día, pero de nosotros ¿quién se acuerda?, por eso es necesario que pongamos en marcha aquella idea de que solamente el pobre podrá sacar al pobre de pobre, que nos unamos a una sola voz y que hagamos que ése programa que tan sonado siempre es por todas las administraciones, se lleve a cabo, y que a Marina no se olvide de su compromiso con el pueblo trabajador.
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