El 10 de mayo, día en que se festeja a las madres, y como es de esperarse, en estas fechas hacen su gran negocio las florerías, pastelerías y restaurantes porque familias enteras celebran.
Al investigar un poco más sobre el origen de esta celebración, encontré algunos datos interesantes; por ejemplo, se dice que en México el Día de las Madres se instituyó en 1922 cuando el diario Excélsior, la Secretaría de Educación Pública (SEP) y la iglesia católica, como una medida para frenar uno de los primeros movimientos feministas de América Latina, el Primer Congreso Feminista de Yucatán, organizado en 1916 por las feministas, Consuelo Zavala Castillo, Elvia Carrillo Puerto, Dominga Canto Pastrana, Raquel Dzib Cicero, Rosa torre González, Beatriz Peniche y Candela Ruíz; se dice que a ese congreso asistieron más de 600 mujeres quienes discutieron temas como los derechos de las mujeres, su papel en la sociedad y su participación en la vida política y pública, todo esto apareció en un artículo de la escritora mexicana Guadalupe Nettel publicado en el New York, en mayo de 2019.
En otro artículo se dice que en Estados Unidos (EE. UU.), el Día de las Madres tuvo un origen antibélico. En 1870, la poeta y activista, Julia Ward Howe, organizó en Boston una manifestación pacífica en la que participaron mujeres que fueron víctimas de la Guerra de Secesión. En ese mismo año, escribió un poema que tituló “Proclama del día de las madres”. Les comparto un fragmento:
¡Levántense, mujeres de hoy!
¡Levántense todas las que tienen corazones, sin importar que su bautismo haya sido de agua o de lágrimas!
Digan con firmeza: No permitiremos que los asuntos sean decididos por agencias irrelevantes.
Sin embargo, con el paso de los años el Día de la Madre se fue convirtiendo en una celebración totalmente romantizada y comercializada, solo les importa generar toda una campaña de amor por la mamá para vender mercancías. Dejan de lado el verdadero origen revolucionario del 10 de mayo.
Por eso, es muy grato reconocer que en estos dos años de pandemia fueron las madres de familia, precisamente, las que lucharon por alimentos para sus hijos, por atención médica, gracias a esas denuncias salió a la luz pública la terrible desigualdad en que viven millones de personas diariamente. Miles de casas sin agua potable, sin luz, familias enteras en una sola habitación, servicio médico deplorable, hospitales en los que no había camas suficientes, ni respiradores, mucho menos medicinas.
¿Pero que tiene que ver todo esto con el Día de las Madres? Pues todo, porque las familias se han demostrado que, si se organizan y luchan, pueden exigir lo que por derecho les corresponde, a pesar de que los morenistas les digan que no se puede, aunque el Gobierno federal, dirigido por Andrés Manuel López Obrador (AMLO) diga que no hay recursos, las mamás lucharán con todas sus fuerzas para conseguir un país más justo.
Las madres luchan para sus hijos, para que tengan escuelas de tiempo completo, para que les paguen a sus maestros, para que haya atención médica, medicinas, servicios básicos, alimentos, una vivienda digna. Son precisamente las amas de casa, las madres de familia, las que dedican parte de su tiempo y de su vida a esta lucha incansable por una mejor vida para sus hijos, gracias por recordarnos el carácter revolucionario de este día. Mi respeto y cariño para todas ustedes ¡Feliz Día de las Madres!
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