Legisladores avalan con la mayoría de Morena la iniciativa de reformas a la ley de energía eléctrica que el titular del Poder Ejecutivo envió al Congreso para monopolizar nuevamente la generación de electricidad –la cual se está produciendo con carbón y combustóleo, que resultan altamente contaminantes– y hacer a un lado la producción de las energías limpias que provienen de la energía eólica, la solar, geotérmica y del agua.
En menosprecio de las energías renovables y limpias; el titular del ejecutivo federal propone que la generación de energías se centre en los combustibles fósiles. La propuesta es un retroceso y va contra las iniciativas mundiales de producción de energía limpia para beneficio del medio habiente y de combate al calentamiento global.
Hace unos meses, durante la Convención Nacional del Instituto Mexicano de Ejecutivos en Finanzas, Joseph Stiglitz, premio Nobel de Economía 2001, recomendó a México que debe cambiar su estrategia de crecimiento basada en combustibles fósiles para acercarse a los países desarrollados.
La tendencia mundial es alejarse del carbón y los combustibles fósiles, para buscar alternativas de energía limpia y sustentable. Es decir, el presidente da un viraje al pasado y se aleja de las tendencias del futuro, eso significa, detener a México.
La administración federal seguirá inyectando recursos a Pemex y la CFE, con el objetivo de fortalecer su injerencia en la economía mexicana; pero, tanto los legisladores morenistas, como el titular del ejecutivo federal, han hecho oídos sordos a las recomendaciones de los expertos que afirman que la debilidad financiera de Pemex y CFE podría vulnerar las finanzas públicas, porque las dos empresas presentan alto endeudamiento, importantes pasivos laborales, baja producción, deterioro de infraestructura, disminución de la demanda crudo y electricidad de alto consumo doméstico e industrial; así como un mercado petrolero inseguro y con precios volátiles.
Expertos economistas y ambientalistas aconsejan que el gobierno transforme sus empresas productivas de energía en una sola, más eficiente y financieramente viable, con una estrategia hacia las energías renovables para mejorar sus puntuaciones ESG, una forma segura de saber que tan sostenibles son las inversiones.
Además, mucho se ha dicho, en diferentes foros internacionales, que México tiene posibilidades de planificar la generación de energías limpias en todo su territorio, por ejemplo, a finales de 2019, se dio a conocer que nuestro país tiene el yacimiento de Litio más grande del mundo, mineral importante por su capacidad de reemplazar al petróleo. Sin embargo, el presidente, Morena y sus diputados, pretenden regresar a México al pasado y no planifican los pasos necesarios para caminar al futuro mundial.
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