Quiero dirigirme a todos mis compañeros activistas, plenarios, colonos, estudiantes, maestros y amigos, ya que considero necesario recordar algunas tareas fundamentales para hacer que nuestra organización continúe creciendo y fortaleciéndose como el único movimiento que realmente lucha por llevar desarrollo y progreso a nuestros pueblos.
Quiero referirme a la difusión de la ideología de nuestro movimiento. Comenzaré resaltando que millones utilizan las redes sociales (Facebook, Instagram, YouTube, Twitter, TikTok, Pinterest, Snapchat y LinkedIn); tan solo en enero de 2023, en México se contaba con 94 millones de usuarios activos, se utilizaban en un promedio de tres horas y 21 minutos por día, de 25 a 34 años y de 18 años a 24, siendo estas edades las más comunes de los usuarios.
Si consideramos que en nuestro país somos 130 millones de habitantes, podremos ver entonces que dos terceras partes de la población utilizan las redes sociales, por ello cobra suma importancia entonces la tarea de difundir en ellas todas las tareas que realizamos los antorchistas del país: gestiones, eventos culturales y de arte, encuentros deportivos, faenas en los pueblos y las colonias, reuniones y denuncias, para que todos aquellos que utilizan alguna red social se informen por medio de ellas acerca de lo que hacemos, pero esta simple tarea debería ser tomada con mucha conciencia, de tal modo que compartamos, compartamos y compartamos, desde las actividades centrales de nuestro movimiento en las páginas oficiales, hasta la más simple actividad realizada por algún compañero en cualquier parte del país, con amigos, con familiares, con conocidos, con todo mundo compartamos, comentemos y stalkemos a Antorcha.
Esa es, pues, la parte digital de difundir todo lo que hacemos como movimiento. Pero existen las formas tradicionales por las cuales se informa la población adulta y los que no tienen acceso a un teléfono inteligente o a internet, que desde los inicios de nuestra organización fueron utilizados y con las que se lograron excelentes resultados, por eso creo que debemos retomarlas y darles la importancia que requieren: el volanteo, las pintas, el perifoneo, la radio y la comunicación verbal.
Cuando Antorcha comenzó a hacer trabajos en las comunidades y colonias, la forma de difundir su ideología fue esa y todos conocemos que dio excelentes resultados. En la Sierra Norte se corrió la voz rápidamente a tal grado que la gente comenzó a buscar a Antorcha y a organizarse en ella, considero entonces que si en un principio funcionó, no creo que la acepción lo sea ahora, es cierto que la tecnología en el mundo ha avanzado mucho en los últimos 40 años, pero si echamos un vistazo a nuestros pueblos, veremos cómo siguen sumidos en la pobreza y el atraso.
A los pueblos de la Sierra Norte no ha llegado dicha tecnificación, en la mayoría de los municipios ni siquiera hay señal telefónica. Por ello, sí es necesario volver a los métodos de difusión tradicionales, debemos hacerlo, los pueblos pobres y marginados necesitan informarse, necesitan saber de antorcha y conocer que existe otra opción donde encontrar un mejor futuro.
Me atrevo a asegurar que en el resto del país las cosas no son diferentes, por ello hago un llamado a todos los antorchistas, debemos darle la importancia que se requiere a todos los métodos de difusión, tanto a los actuales como a los tradicionales, para hacer que Antorcha llegue a más y más gentes, hasta el último rincón del país y del mundo del mundo si fuera posible, el momento histórico nos lo exige y debemos cumplir cabalmente la tarea. ¡Adelante, camaradas!
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