*Xóchitl Flores ordenó derribar con maquinaria pesada locales de comerciantes humildes
Chimalhuacán, Edo. de Méx. Treinta vendedores ubicados en la calle Escalerillas, a un costado del tanque de agua potable Yautlali, en la colonia Ampliación San Pablo del Ejido de Santa María Chimalhuacán, fueron desalojados de un predio que desde hace siete años ocupaban. La Policía destruyó locales con maquinaria pesada.
Un fuerte dispositivo de trabajadores de la administración morenista y policías de Seguridad Ciudadana y Antimotines comandados por el titular de la dirección de Desarrollo Urbano, Adrián Soto, desalojó violentamente a 30 comerciantes que construyeron sus locales en un predio particular.
Los funcionarios llegaron a la colonia con máquinas que usaron para arrasar los locales, construcciones precarias de tabique sobrepuesto, lonas, láminas y madera. Los vendedores son vecinos de la zona, que hace varios años se organizaron para tener una fuente de empleo y ofrecer sus servicios a la población de la zona.
“Trabajamos de manera honesta, tenemos siete años sirviendo a los vecinos de manera pacífica y honesta y, lo más importante, es que tenemos el permiso del propietario del predio, por lo que nos establecimos de manera legal; los comerciantes que tienen más recursos construyeron sus locales con tabique y losa, otros los teníamos con lonas, láminas y madera. Teníamos un trabajo honesto y ahora nada, todo por culpa de la presidenta municipal, Xóchitl Flores, quien no nos da nada, pero nos ha quitado lo poco que teniamos”, comentó Mónica Olalde López, comerciante.
“No es justo; nos tratan como delincuentes, llegaron muchos policías, destruyeron mi local, perdí todo. La alcaldesa Xóchitl Flores está acabando con todo lo bueno que tenemos: fuimos a pedirle máquinas para arreglar las calles y nos dijeron que no había, pero para destruir nuestros locales sí hubo máquinas”, comentó Lorena Ríos.
La zona del ejido de Santa María Chimalhuacán carece de varios servicios públicos, la mayoría de las calles carece de pavimento, no hay alumbrado público y la inseguridad priva en la región: el municipio se encuentra en el cuarto lugar de inseguridad en el Estado de México.
De acuerdo con lo dicho por los vecinos, el operativo realizado por el ayuntamiento fue “impresionante, en la zona no habíamos visto tantos policías. Es raro ver a los policías o patrullas en la colonia. No tenemos apoyo de la presidenta: necesitamos agua, pavimento, seguridad; es lo que debería resolver la administración morenista”, indicó Andrés Pérez, líder social en la zona.
Las autoridades que realizaron el desalojo y derrumbe de los locales argumentaron que tenían órdenes y contaban con la autorización legal para de desalojo, orden que no mostraron a los afectados, pero utilizaron la fuerza pública para destruir los 30 locales de los vendedores.
Este desalojo se suma a la violencia que la administración morenista utiliza contra la población: el pasado 8 de agosto, los locatarios del viejo mercado “Ignacio Zaragoza”. Este inmueble se localizaba a un costado de la presidencia municipal, pero fueron retirados violentamente por parte de la presidencia municipal; ahí también utilizaron maquinaria y a la fuerza pública para destruir el lugar.
En Chimalhuacán el 58.97 % de la población se dedica al comercio, toda vez que el municipio carece de industria, agricultura o ganadería, por lo que las ventas son la principal fuente de empleo e ingresos de las familias que habitan en el municipio.
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