* Les venderían el predio a un precio justo, explican, y eso nunca sucedió
Torreón, Coah. El Movimiento Antorchista, a través de su comité estatal en Coahuila, solicita la intervención del presidente municipal de Torreón, Román Alberto Cepeda, y del gobernador Manolo Jiménez Salinas para solucionar la problemática de vivienda que pone en riesgo a 170 familias del fraccionamiento Anna, al norte de la ciudad de Torreón.
Hace diez años, un grupo de personas ingresó a un predio abandonado en la zona conocida como Fraccionamiento Anna con el fin de tener un lugar propio donde vivir.
Muchos de ellos no contaban y continúan sin tener acceso a un crédito de vivienda. Su necesidad fue la que los llevó a hacer esta acción.
Sin embargo, los colonos aseguran que los dueños del predio prometieron en ese tiempo venderles el terreno a un precio justo.
Al día de hoy, eso nunca sucedió, y hace menos de un mes se les ha notificado que tienen que desalojar el lugar donde viven debido a que el dueño así lo quiere.
Esta advertencia era conocida por los colonos, quienes buscaron alternativa para evitar que esto pasara. Fue en el proceso electoral cuando solicitaron la ayuda al candidato Román Alberto Cepeda, quien iba por la reelección del ayuntamiento y quien dijo en su momento que iba a intervenir para que no sucediera.
Ahora, tres meses después de que se llevó a cabo el proceso electoral, los habitantes de la colonia no han tenido acercamiento de la autoridad municipal.
El pasado 13 de agosto, en un juicio, se ordenó que las familias tuvieran un mes para desalojar sus casas; de lo contrario, serían sacadas a la fuerza.
Como consecuencia del poco interés de las autoridades municipales y estatales, los colonos, en su desesperación, decidieron realizar una protesta el martes 27 de agosto para pedir ayuda de manera urgente y, de no obtener una respuesta, se mantendrán en plantón indefinido a las afueras de la presidencia municipal de Torreón.
Piden sensibilidad a las autoridades y a la opinión pública, pues están en riesgo 170 familias de escasos recursos, donde hay niños y ancianos, y donde han hecho sus hogares en estos últimos diez años.
Los colonos piden la intervención del Gobierno en esta problemática social y que no se criminalice a los colonos, pues sólo han buscado tener un lugar donde vivir.
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