Los pueblos deben aprender las lecciones de su historia, lo que ha ocurrido a lo largo de los tiempos, lo bueno y lo malo, esto cada día se vuelve más indispensable. Los mexicanos deben aprender la diferencia entre el trabajo y la demagogia; entre la verdad y las mentiras; entre los intereses mezquinos que buscan privilegios y sus verdaderos líderes, aquellos que entregan su vida y luchan por una nueva sociedad.
Deben aprender a distinguir entre los que siembran el odio entre el pueblo y los que trabajan para educarlo y organizarlo. Esto viene a cuento porque hoy quiero referirme brevemente a la historia de las últimas décadas del municipio de Chimalhuacán, estado de México, y también quiero referirme al 36 aniversario del Movimiento antorchista en esta entidad.
Hoy más que nunca, la construcción de una nueva sociedad, con la clase trabajadora en el poder, necesita gente firme, decidida, comprometida, leal a la causa y dispuesta a correr cualquier riesgo.
Chimalhuacán pasó de ser uno de los municipios más atrasados, antes del año 2000, para convertirse en una ciudad modelo, al ser gobernada por Antorcha. Hace 24 años este municipio era gobernado por uno de los peores cacicazgos, el cacicazgo de Guadalupe Buendía, alias “La Loba”, quien hacía imperar el miedo entre la población y se enriquecía a costa de que el pueblo chimalhuacano sufriera entre la miseria, la marginación, el olvido y el desamparo.
En el año 2000 llegó al poder municipal el biólogo Jesús Tolentino Román Bojórquez, miembro destacado del Movimiento Antorchista Nacional. En aquel entonces en Chimalhuacán reinaba el atraso total, el 90 % de su población carecía de servicios.
Por la enorme apatía y abandono de las autoridades de entonces, Chimalhuacán, siendo un municipio de tal magnitud, sólo contaba con un camión de basura, seis patrullas destartaladas, calles convertidas en verdaderos basureros, en donde, un día sí y otro también, aparecían muertos encostalados (ejemplo: Avenida Torres); con más del 90 % de las calles sin pavimentar, y viviendas sin servicios de agua y drenaje, etcétera.
En este mismo año varias agrupaciones se unieron bajo el Proyecto “Nuevo Chimalhuacán” encabezado por el biólogo Jesús Tolentino Román Bojórquez. Así se organizaron miles de personas nativas, colonos, comerciantes, estudiantes, taxistas, y junto con el gobierno municipal, bajo el liderazgo de Jesús Tolentino, a través de decenas de gestiones y varias movilizaciones ante las autoridades estatales y federales, consiguieron cambiar el rostro de Chimalhuacán, dejando atrás el enorme atraso en que vivía.
Me falta espacio para seguir enumerando las obras construidas por el gobierno antorchista en Chimalhuacán.
Usted, querido lector, podrá creer que exagero, pero la mejor manera de comprobar que así es, si usted no lo cree, es visitar Chimalhuacán y constatar que todas estas obras existen y que se construyeron en el periodo que mencioné líneas arriba. Aunque también, advierto que encontrará la falta de mantenimiento y el abandono de muchas de estas obras por parte del Gobierno actual de Morena.
Este 2024, el Movimiento Antorchista Nacional celebró 36 años de la llegada de nuestra organización a este municipio, y lo festejó en grande, con la presencia de miles de antorchistas que se reunieron para fortalecer sus lazos y su conciencia al escuchar a nuestro querido maestro, líder indiscutible del todo el antorchismo nacional, ingeniero Aquiles Córdova Morán, quien nos recordó la tarea tan importante que Antorcha se trazó desde su nacimiento, gobernar nuestro país, para que de una vez por todas, ya con un gobierno realmente emanado de las entrañas del pueblo se cambien los destinos de nuestra patria y se cambie sustancialmente la vida de los millones de mexicanos que hoy viven en pobreza.
La clase trabajadora debe entender que no sólo nos deben preocupar los problemas locales, debemos ampliar nuestra visión, ya que los problemas locales “no son más que un eslabón de la cadena de problemas que existen en… por lo que, la solución de los mismos requiere mucha entrega, mucho trabajo, mucho sudor, muchos recursos. Es por eso que no cualquiera se atreve a hablar de ellos o dimensionarlos correctamente... por lo que los ‘del poder’ los mantienen en silencio para evitar que la gente se concientice y después exija que se resuelvan, porque a ellos poco o nada les importan”.
Por eso es urgente que el pueblo se eduque y se organice. Si queremos sacar a nuestro país de la ignorancia, de la pobreza, la desigualdad, insalubridad, de la falta de servicios, de la violencia, debemos trabajar con urgencia en la concientización y organización del pueblo trabajador, “cambiar de clase en el poder”, la de ahora, la de siempre, no le importa un cambio, porque así se beneficia, así como están ahora las cosas.
Hoy más que nunca, la construcción de una nueva sociedad, con la clase trabajadora en el poder, necesita gente firme, decidida, comprometida, leal a la causa y dispuesta a correr cualquier riesgo. Que no traicione la causa de todos los trabajadores, de todos los pobres de México. No traicionar sus principios ni por todo el oro del mundo.
Esto es fundamental, compañeros antorchistas, si queremos un cambio real en nuestro país, debemos trabajar para ello, debemos en primer lugar, concientizarnos y educarnos y sobre todo educar a las masas y organizarlas, hacerles ver la necesidad de que nuestro país cambie de rumbo, por uno más justo y próspero para todos los mexicanos.
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