El dirigente considera que ante la creciente pobreza de la mayor parte del campesinado de Jalisco y del país, es el estado quien está obligado a inyectar recursos públicos para que las familias de los trabajadores del campo puedan enfrentar las consecuencias de este flagelo social que azota, cada vez más y más, a los sectores más desprotegidos del sector rural.Concluyó.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario