Hoy en día, es un tema frecuente el hablar de inflación, los bajos salarios y nulos empleos, pero lo que no es constante en la conversación es qué se hará para darle solución de fondo a estos males que aquejan a todos los mexicanos, sin distinción, aunque se catalogue como clase alta, media o baja, a todos pega pero si bien, no del mismo grado.
Pero siempre son las familias vulnerables las más afectadas, resultado de políticas públicas que no son implementadas para darle solución a sus necesidades, provocando que no tengan un ingreso para comprar los productos de la canasta básica, que de acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) una alimentación adecuada tiene que tener nutricionales, kilo calóricos y proteicos, pero las familias que tienen un ingreso semanal de mil pesos, y derivado de la inflación, poco pueden acceder a él.
En recientes días vi una nota que hacía referencia que Mérida tiene el costo de la canasta básica más barata a nivel nacional, según la Profeco. Si bien puede ser cierto, el salario de los meridanos no alcanza para subsidiarla.
Pero los órganos gubernamentales se contradicen uno a otro, pues a decir del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), en septiembre de este año, Mérida fue una de las 10 ciudades a nivel nacional que tuvo una alza en los productos de la canasta básica. Asimismo es de destacar que los meridanos son los que tienen los salarios más bajos del país con apenas 5 mil 700 pesos mensuales.
Sea cierta o no la información que cada órgano da, lo que sí es cierto es que los yucatecos, los meridanos sufren por las malas políticas gubernamentales.
Los datos pueden variar, pero la realidad es palpable y las familias están en total desprotección. Como ejemplo, las familias que viven al sur de Mérida, donde la inflación, empleos mal pagados y desempleo, ha mermado la vida de familias de la colonia de San Luis Dzununcán, al sur de Mérida, así como la falta de servicios básicos que carecen desde hace cinco años, por lo que exhortan a las autoridades gubernamentales a que sean más flexibles con los servicios y los doten de apoyos.
Los vecinos de San Luis Dzununcán han expresado su preocupación por la falta de mejores condiciones de empleo en el estado, pues reina el empleo informal, los bajos salarios y el desempleo en la capital yucateca, donde mil 700 pesos de salario a la semana no alcanzan para una familia de cinco personas, ante el aumento deslavado de la canasta básica, denunció Noemí Hernández Gonzales.
Hoy en día las familias se baten entre comer o buscar cómo sobrevivir. Si los meridanos los yucatecos y mexicanos en general no nos organizamos y luchamos para mejorar estas condiciones, estaremos condenado a seguir viviendo en esta situación.
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