Para muchos jóvenes, Tecomatlán es una oportunidad para continuar sus estudios, ya que no cuentan con recursos económicos para ingresar y sostener su preparación académica en una escuela particular. El municipio tiene una Villa Estudiantil en donde los estudiantes se hospedan y alimentan a un costo muy accesible.

Por si fuera poco, este emblemático lugar cuenta con amplias instalaciones deportivas y culturales para que practiquen arte y deporte todos los habitantes de este lugar. Nos centraremos en el deporte.

El deporte, en nuestra actualidad, está conceptualizado como una simple mercancía que se maneja en el actual sistema capitalista y a la cual no todos pueden acceder. Por lo tanto, los entrenadores, jugadores, material deportivo, entrenamientos, instalaciones deportivas, gestiones son utilizados como un medio para resolver y satisfacer intereses económicos de la clase más privilegiada.

El pueblo pobre necesita organismos deportivos que lo ayuden a desarrollarse física e intelectualmente para ser hombres de bien a nuestra sociedad. Sin embargo, la mayoría de estos organismos deportivos  son particulares y no están al alcance de los jóvenes con escasos recursos económicos y están formados por entrenadores especializados en alguna disciplina deportiva que cobran altas cuotas por entrenamientos, las instalaciones deportivas son privadas y se tienen que rentar y, los gobiernos municipales no apoyan al deporte. Es decir, vivimos en una sociedad en la que al Gobierno federal no le importa promover el deporte entre las masas, si esto no genera una ganancia económica.

Con otro enfoque, analizando  el deporte, como herramienta fundamental en la educación y transformación  de un hombre nuevo, un hombre integral en todos los aspectos; el Movimiento Antorchista Nacional (MAN) preocupado por esta importante tarea revolucionaria en nuestros jóvenes, ha venido desarrollando y consolidando  desde hace  muchos años un frente deportivo Comisión Deportiva Nacional (CODENA) que se encarga de masificar y alentar al pueblo a la superación del espíritu por medio de la práctica deportiva.

Y, particularmente, en el municipio de Tecomatlán, el Pleno de Antorcha Campesina ha tomado esta misma tarea con decisión y convicción: formar la Comisión Deportiva de Tecomatlán (CDT). Este organismo, funciona con el objetivo de desarrollar y promover las actividades deportivas, recreativas y cívicas en todas las escuelas del municipio y el pueblo en general.

No obstante, vivimos en una situación de precariedad económica en la que se encuentra el estado de Puebla, promovida por una serie de recortes presupuestales por el Gobierno federal que conlleva a que muchos jóvenes no tengan acceso al deporte, ya sea porque no cuentan con infraestructura deportiva en sus escuelas o municipios, porque no cuentan con material deportivo, porque no cuentan con entrenadores y lo más importante, por desgracia, nuestras autoridades federales y estatales no cuentan con una visión masificadora y competitiva del deporte.

Ante esto, Antorcha no se queda de brazos cruzados. El Pleno antorchista, la presidencia municipal y la Comisión Estudiantil de Tecomatlán han buscado la forma de no detener el deporte, de no privar de este derecho fundamental a nuestros jóvenes, contribuyendo en la compra de material deportivo, realizando el mantenimiento de las instalaciones deportivas del municipio, contratando algunos entrenadores. Además, la visión de  Antorcha de superación y lucha ha permeado en nuestros jóvenes y los ha  motivado para que aquellos que han  desarrollado alguna capacidad física o talento deportivo, se sumen como monitores deportivos para entrenar a sus propios compañeros de menor edad. Realizan actividades económicas, se suman a actividades de la comunidad, apoyan en la organización de torneos de los pueblos circunvecinos, es decir, promueven el deporte entre las masas sin buscar algo a cambio.

Esto busca el Movimiento Antorchista Nacional, promover una visión distinta del deporte en el que el hombre nuevo eleve su espíritu y logre sensibilizarse ante la realidad y no se quede estancado. Que luche contra las injusticias que padecen sus iguales, que concientice su papel como deportista revolucionario en estos tiempos difíciles y se sienta un mexicano orgulloso, orgulloso de su patria y, por lo tanto, triunfadores, primero en la cancha y después en todos los terrenos a donde los lleve a competir la vida civilizada.