Ha pasado poco más de dos semanas de los comicios del 6 de junio y conforme pasan los días va quedando cada vez más claro que estas elecciones fueron verdaderamente inéditas. Y no crea amigo lector que fue porque se tuvo un altísimo porcentaje de participación ciudadana (de las más de 93 millones de personas que pudieron ejercer el voto, el porcentaje de participación fue de entre el 51.7 y 52.5 por ciento) o, porque fueron las más vigiladas y resguardadas por las autoridades a fin de garantizar el voto libre y secreto, así como la seguridad de los votantes.
Todo lo contrario, fueron las elecciones de compra masiva de votos, de intervención de fuerzas ajenas a toda democracia: robo de urnas, secuestro de representantes de partidos políticos y activistas, intimidación a familias completas si no votaban por “x” o “y” candidato, etc.
Y en Sinaloa no fue la excepción, todo esto se dio en numerosos municipios a ciencia y paciencia de las autoridades de todos los niveles y sólo algunos fueron documentados por los medios de comunicación. ¿Dónde estaba la Guardia Nacional? ¿Los cuerpos de seguridad estatal y municipal? ¿El Ejército?
Los ganadores en esta contienda no fueron los ciudadanos, ni siguiera fueron los candidatos " triunfadores" sino fuerzas extrañas a toda democracia.
Negro panorama se cierne sobre la cabeza de los mexicanos, si ya antes de las elecciones las estadísticas oficiales mostraron un retroceso en seguridad, en economía, en servicios, ¿qué nos espera con la mano negra que ya se asomó y va por más poder?
Los candidatos ganadores como en el caso de Sinaloa, están ante un gran reto, pues generaron muchas expectativas y en estas condiciones que comentamos, no va estar nada fácil que les cumplan a los ciudadanos.
Al doctor Rubén Rocha Moya, gobernador electo, le esperan ingentes esfuerzos para mejorar la seguridad pública, y una señal de que se va en el camino correcto es una sustancial disminución de los homicidios dolosos, de los feminicidios, y demás delitos que hoy acosan a las familias sinaloenses de todos los estratos sociales.
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