Cerca de 2 millones y medio de estudiantes regresarán a clases presenciales para el ciclo escolar 2021-2022 en el estado de Veracruz y la covid-19 sigue más vivo que nunca. En tan solo un mes y medio, el número de casos positivos que se registran al día se triplicaron pasando de 280 casos el 1 de julio a 928 nuevos el 13 de agosto pasado en la entidad.
De acuerdo a los datos de la Secretaría de Salud en Veracruz, el mes de junio inició con 61 mil 506 casos confirmados de covid-19 en la entidad, dos meses más tarde, la cifra que se había presentado de esta enfermedad era de 90 mil 796; lo que representa un aumento del 30 por ciento en tan solo dos meses.
En Xalapa, el número de casos positivos hasta hace dos días alcanzaban ya los 8 mil casos confirmados, 7 mil 933 eran los casos que se reportaban el sábado pasado; esta situación trajo consigo el aumento en la ocupación hospitalaria. La subdirectora de Salud del Ayuntamiento de Xalapa, Flor Patricia del Ángel Aguilar, advirtió que la ocupación hospitalaria en la ciudad está a punto de llegar a su límite y que, de toda la pandemia, es en estas fechas donde se está teniendo la mayor cifra de contagios de Covid-19.
La falta de vacunas en algunos sectores de la población está haciendo que repunten los casos de covid-19 y ahora está golpeando a personas de entre 20 y 39 años, y menores de edad, dijo Juan del Bosque Márquez, director médico del Sanatorio Rebeca. Ahora el sector de la población que más está siendo golpeado por el coronavirus es el de los adolescentes, y en un gran porcentaje, niños y jóvenes están ahora perdiendo la vida a causa de este virus y sus mutaciones.
Sin embargo, esto no parece importarles mucho a las autoridades ni al gobernador Cuitláhuac García Jiménez y mucho menos al secretario de Educación de Veracruz, Zenyazen Escobar García, quienes a sabiendas de todos estos datos y la gravedad de los contagios y muertes que se han presentado en los últimos meses, salieron a decir en un principio que independientemente de los contagios, las muertes y el color del semáforo el regreso a clases sería inminente.
Pongámonos a pensar en este mensaje que mandan las autoridades por un momento, cientos de miles de familias han perdido a seres queridos a causa de la pandemia, muchos de ellos también han perdido sus trabajos y miles de estudiantes han abandonado las escuelas para poder integrarse al campo laboral para ayudar al sustento del hogar, y simplemente de la manera más fría y despreocupada que puede haber estos personajes quieren retomar una actividad donde la convivencia entre las personas es necesaria haciendo que el contagio sea algo inevitable, es algo inconcebible.
Pero ya no es de sorprender este tipo de actos, pues todos sabemos que ellos son fieles seguidores y predicadores de los pensamientos del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrados, que tal cual predicadores van llevando la “cátedra” de este señor. “Llueva, truene o relampaguee regresamos a clases presenciales” fueron las palabras del presidente de hace un mes refiriéndose a que pase lo que pase, maestros, niños, jóvenes y todos regresamos a las aulas. Y no solo eso, hace unos días en su mañanera el presidente dijo que es necesario tomar algunos riesgos, que, si siempre estamos pensando en que nos podemos contagiar o temiéndole a la muerte, nunca saldríamos de nuestras casas, rematando su discurso vacuo con la canción “Los caminos de la vida”.
Creo que lo que hace el señor presidente y su séquito de fieles es llevar a un grado superior la desfachatez y burla hacia todos los mexicanos que estamos sufriendo las consecuencias de la pandemia, no solo en la salud, sino también en lo económico, familiar y social. Pensar que los contagios desaparecerán simplemente por ordenanza divina del presidente o que por el autoritarismo del señor gobernador las escuelas tendrán las condiciones necesarias para recibir a cientos de miles de jóvenes y de la misma forma los docentes elevarán el conocimiento perdido durante estos ya casi dos años de la pandemia, es no tener la mínima idea la magnitud del problema.
La Federación Nacional de Estudiantes Revolucionarios “Rafael Ramírez” (FNERRR) ha tomado la iniciativa desde casi ya un año de presionar a las autoridades para que todos los estudiantes sean vacunados antes de regresar a las clases presenciales. Más del 70% por ciento de la población debe ser vacunada para que el regreso a clases no sea un peligro. Además, en las últimas semanas se han dado a la tarea de realizar mantas y tomar, de manera simbólica, las escuelas mandando el mensaje a las autoridades de educación que pase lo que pase ellos no regresarán a clases presenciales.
Ahora y más que nunca la población debe unirse para tomar una decisión que no afecte su integridad, su bienestar y su salud, luchar por mejores condiciones de vida. Debemos también ser conscientes del porqué se están tomando estas decisiones tan radicales, ¿es porque realmente le preocupa al gobierno la educación de nuestros niños?, ¿es porque saben que la educación es el pilar para una sociedad más justa y equitativa? O ¿será porque las ganancias de los grandes empresarios y los grandes capitalistas se han visto afectadas por el poco consumo de la población? Juntémonos y luchemos por una sociedad más justa para todos nosotros y para nuestros hijos, es el momento de un México mejor. Y no solo yo lo pienso, que conste.
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