"Las necesidades son muchas y los recursos pocos", es la excusa con la que la actual titular de la SEP, Leticia Rodríguez Amaya, se anticipaba a la polémica que causaría el presupuesto que asigna 402 mil 276 millones de pesos del ramo 11, correspondiente a educación pública.

De acuerdo con lo que comentó la funcionaria, se trata de una propuesta de incremento de 5.1 por ciento respecto a lo aprobado en 2022; según ella es histórico, sin embargo, si lo comparamos con el recurso asignado en 2019, que fue de 403,515 millones ejercidos, observamos que el presupuesto asignado por la 4T para el 2023, es menor que en 2019, y a partir de ese año el gobierno encabezado por Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha tenido una ampliación del siete por ciento de los recursos, los cuales se han destinado, en su gran mayoría, al programa de becas. 

Efectivamente, las necesidades en la educación y escuelas son muchas y éstas a causa de la pandemia de covid-19 y a los efectos negativos de los últimos sismos ocurridos en nuestro país han cambiado y sí son muchas, pero en el PEF 2023. La 4T, ¿Dónde propone invertir los recursos? 

La SEP y Leticia Rodríguez tienen 22 mil 406 millones de pesos para distribuir: 19 mil 446 millones provienen del incremento de los recursos que se pretende asignar, y dos mil 961 millones de tres programas sacrificados, que la 4T consideró que no eran de primera necesidad y a los que les aplicó recorte presupuestal: se trata del Programa de Elisa Acuña, le realizaron un recorte de dos mil 622 millones de pesos. Estas becas tenían como fin impulsar a quienes deseaban continuar su formación académica o profesionalización docente, realizar su servicio social, realizar estudios en el extranjero, e iniciar o concluir su titulación.

Para programas que dan presupuesto a universidades, la 4T realizó un recorte de 100 millones de pesos, en educación superior y posgrado; por ejemplo, el presupuesto estimado en 2023 es de 162 mil 744 millones de pesos, 38,337 millones menos que lo aprobado en 2015, un déficit acumulado de 19 por ciento.

México tiene 315 investigadores por millón de habitantes, por lo que ocupa el lugar 76 a nivel global y se compara desfavorablemente respecto a países como Israel, que tiene 8,341 investigadores por millón de habitantes, esto nos pone en gran desventaja tecnológica con países que invierten y desarrollan investigadores, por lo que, nuestro país seguirá dependiendo de la tecnología de esos países.

Otro programa afectado por Morena fue el de Construcción y Mantenimiento de Infraestructura que aún administra el Instituto de la Infraestructura Física Educativa (INIFED), esta institución es la que se encarga de la asignación y transferencia de recursos para la construcción y mantenimiento de la infraestructura escolar únicamente en la Ciudad de México, en los restos de las entidades federativas se encargaban los órganos creados por las autoridades locales, en el Estado de México el Instituto Mexiquense de la Infraestructura Educativa, en Veracruz, el encargado es el Instituto de Espacios Educativos del Estado de Veracruz, entre otros, dichas instituciones deben vigilar que las obras se realicen en tiempo y forma así como cumplir las normas técnicas de seguridad.

El INIFED tiene a su cargo el programa de Escuelas al Cien, de carácter nacional que surgió a partir de la reforma educativa de 2013 y cobró relevancia social por los sismos de 2017, ya que las instituciones que sufrieron daños en su estructura serían reparadas con los recursos asignados para tal fin, AMLO determinó que los recursos que destinaba el INIFED se otorgarían de manera directa a las escuelas y en los hechos se propuso la desaparición de este organismo, olvidan que muchos padres de familia no son ingenieros, arquitectos, que no accedieron a la educación superior o que no tienen tiempo para realizar presupuestos, buscar asesoría, capacitarse en línea, etc. Tampoco hay claridad si el programa Escuelas al Cien tendrá continuidad en este sexenio, si habrá vigilancia de las obras que están en proceso o próximas a realizarse.

De los recursos obtenidos, se propone dirigir seis de cada 10 pesos a La Escuela es Nuestra, con ello el programa pasaría de un presupuesto de 14,662 a 27,000 millones de pesos; un incremento de 85 por ciento de los recursos para una estrategia que apenas tiene cobertura en el 47 por ciento de los planteles de educación básica del país y que no termina de consolidar los criterios de transparencia y rendición de cuentas para las responsabilidades de infraestructura, jornada ampliada y de alimentación que adquirió con la eliminación del programa de Escuelas de Tiempo Completo.

A este monto se suman tres de cada 10 pesos para incrementar la bolsa del problemático Programa de Apoyo a Centros y Organizaciones de Educación. Este programa lleva varios años señalado por la Auditoría Superior de la Federación por gastar hasta 40 veces más del monto presupuestado, por ejemplo, en 2017, el fondo tuvo autorizado 775 millones de pesos pero terminó ejerciendo 31, 804 millones; lo mismo sucedió en 2019, cuando de 728 millones ejerció 29,820 millones.

Mientras tanto, no se contemplan recursos adicionales para recuperar la trayectoria educativa de la primera infancia, pese a que hay evidencia de su importancia para el desarrollo educativo de los estudiantes. Tampoco se identifica una partida presupuestal especial para financiar programas de tutorías o de acompañamiento docente que permitan contemplar esfuerzos para alcanzar aprendizajes que no se desarrollaron en dos años de educación a distancia.

Andrés Manuel López Obrador presentó su proyecto a los legisladores para su análisis y eventual aprobación, da por hecho que no hay afectaciones serias debido a la pandemia por covid-19. Incrementa recursos a educación más no para atender la emergencia educativa sino para aplicar una política de carácter clientelar.

La defensa que usa la 4T, es la supuesta entrega de dinero sin intermediarios para evitar desvíos, aunque la Auditoría Superior de la Federación (ASF) ha identificado casos en los que servidores de la nación intimidan a comités de padres de familia para hacer reparaciones con quien ellos sugieren, bajo amenaza de perder los beneficios del programa. 

Se debe poner un alto a los abusos y excesos que la 4T viene cometiendo contra la educación de niños y jóvenes en México, sabemos que no se logrará de manera aislada, se necesita que en conjunto, de manera organizada actuemos para quitar del poder a los que están traicionando a millones de humildes, esa es la tarea que tenemos los que identificamos el mal que Morena está realizando al país y a los que juró defender.