El gobierno de Cuitláhuac García Jiménez no está resolviendo las necesidades elementales de la población veracruzana, por lo que la situación del estado se complica cada día más: los robos en casas, en negocios y hasta en escuelas se incrementan, lo mismo sucede con los asaltos a personas en la calle; la violencia crece, pues solo en las últimas 24 horas los medios de comunicación dieron cuenta que hubo 17 ejecutados en 12 municipios; no hay inversión pública ni privada con el consiguiente estancamiento económico y caída en la producción.El campo veracruzano está deprimido como consecuencia de los recortes del presupuesto destinado al sector agropecuario en el 2019 y 2020 (el 40 por ciento sumando los dos años).Un ejemplo de esta depresión lo encontramos en el municipio de San Pedro Soteapan, que de acuerdo con los datos oficiales de SIAP-SADER, 2020, la superficie sembrada de maíz disminuyó de 16,981 hectáreas en 2016 a 4,730 en el año agrícola 2019.Decreció en 72 por ciento la superficie sembrada y así se encuentran la mayor parte de las regiones en el estado.
A esto, se agrega el mal manejo que ha hecho el gobernador de la pandemia de covid-19, tanto en el terreno de la salud como en el económico, que al desestimar el peligro del virus y no tomar las medidas preventivas para enfrentarlo, dejando que la enfermedad pegara de lleno a la gente, causando hasta el miércoles 22 de julio, la cifra acumulada de 17,610 casos positivos y 2,343 muertos y que ha provocado además, que no sólo NO se generen nuevos empleos, sino que se pierdan miles de éstos en el sector formal e informal, que quiebren miles de pequeñas y medianas empresas y que se desborde el número de pobres.
Estos resultados tienen al gobernador de Veracruz como uno de los peores calificados a nivel nacional, en todas las encuestas que diversas empresas llevan a cabo cada determinado tiempo para medir el nivel de aprobación de los gobernadores.
Tan desgastada está la imagen del gobernador y de su partido en Veracruz, que tuvieron que recurrir a una burda maniobra en el Congreso del Estado, al modificar la ley electoral para robarse la elección del 2021 y blindar a Cuitláhuac García en contra de la revocación de mandato, proceso en el que el pueblo seguramente lo sacaría del gobierno antes de los 6 años para lo cual fue elegido.
Eliminar del Código Electoral los Consejos Municipales Electorales y dejar a los partidos sin dinero para las campañas, significa, en los hechos, la injerencia del gobierno en las elecciones, en el manejo y control de las urnas al trasladarlas de los poblados apartados a las cabeceras distritales y dejar maniatada a la oposición para que no tenga recursos con qué hacer campaña.Mientras los del gobierno y los de Morena utilizarán dinero del erario bajo de la mesa y los programas asistenciales que fueron diseñados precisamente con fines clientelares.
Y no se trata de criticar por criticar, yo escribo en nombre de miles de veracruzanos organizados en el Movimiento Antorchista, diseminados en muchos pueblos y colonias del estado, que estamos sufriendo las consecuencias de este mal gobierno, de su falta de compromiso y de visión de Estado.El pasado 14 de noviembre, previo a su primer informe de gobierno, sostuvimos una reunión con Cuitláhuac García y con el subsecretario de gobierno Carlos Juárez, en la que se comprometieron a concluir el hospital de la cabecera municipal de Soteapan, el hospital de la cabecera municipal de Ayahualulco, construir el techado de cuatro canchas en el Deportivo Antorcha en el Puerto de Veracruz, el centro de salud de Mecayapan, restituir cinco de las 14 becas deportivas que le fueron canceladas a igual número de entrenadores por parte del actual director del IVD (solo por ser antorchistas) e iniciar el proceso de regularización en las colonias en las que el mismo quedó inconcluso.
Acuerdos que el gobernador Cuitláhuac García y el subsecretario se pasaron por el arco del triunfo, faltando a su palabra y a su compromiso como autoridad del estado.Así, ¿quién le tendrá confianza y respeto? Nadie, él mismo no se respeta.
Hace unas semanas, los colonos que necesitan sus escrituras para múltiples necesidades, entre ellas, gestionar los servicios de las colonias, le pidieron al gobernador, pusiera a los funcionarios encargados de las dependencias, obligadas por ley a trabajar en la regularización de los asentamientos humanos, tales como el INVIVIENDA, la Dirección de Patrimonio del Estado y el INSUS, y, en lugar de atender la petición contestó, ordenando a la fiscalía del estado desenterrar un expediente con más de 5 años de antigüedad para acusar judicialmente a tres compañeros y tratar de encarcelarlos, hecho que considero una actitud nefasta y represiva en contra del pueblo que simplemente pide que los funcionarios cumplan con su trabajo.Pero la lucha de los colonos no fue inútil, ya que puso al descubierto las corruptelas del ex director de Patrimonio del Estado, Belisario Reyes Herrera, quien tuvo que ser destituido del cargo.
Llamo a todos los veracruzanos afectados por el gobierno de la 4T, a los ciudadanos pensantes a que nos vayamos preparando desde ahorita, para quitarnos la soga que nos ha echado al cuello este gobierno, que se está malgastando el presupuesto de los veracruzanos y que quiere encumbrarse en el poder para siempre; un gobierno que menosprecia la ciencia y el conocimiento para conducir a un estado y a un país y que pretende jugar con la inteligencia del pueblo, con cuentos como la enfermedad por covid-19 del secretario de gobierno Eric Cisneros; los llamo para que en las próximas elecciones no votemos por los candidatos de Morena, para que llevemos al poder a personas que realmente se preocupen por el desarrollo de Veracruz, por su crecimiento económico, porque se haga obra pública en beneficio de los pueblos, se resuelva el problema de la vivienda, se apoye al campo y, sobre todo, que genere empleos bien pagados para todos.
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