Ya vi la última temporada “Sex Education” y van algunas cosas sobre esto. Espero no herir a nadie, porque no me centraré en el asunto de ideología de género que durante los episodios es apabullante, si no un tanto en lo menos evidente. Lo que quiero destacar de la serie de la que hablo es que no cuenta una historia interesante para mí y quiero decir que, sin ser cinéfilo, ni calificado para hablar de esto, es aburrida.
Tampoco me jacto siquiera de conocer películas buenas ni series, sin embargo, en el acervo común, podemos recordar algunas producciones que pasaron a ser parte de nuestra memoria porque nos mantuvieron al filo de la butaca. Unos ejemplos pueden ser “Macario” de Roberto Gavaldón, “La La Land” de Damien Chazelle, o por qué no, en la industria del anime, la serie de “Death Note” de dirección que no conozco.
No estoy errando al mencionar estos títulos, porque me consta que mucha, muchísima gente en estos tiempos modernos prefiere ver una película o serie antes que leer un cuento, o una exquisita novela como el “El conde de Monte Cristo” de Alejandro Dumas (comercial para que lo lean), o leer poesía, tan hermosa que es. Regresando al asunto de la serie del primer párrafo y después de decir que es aburrida, quiero sumar al por qué.
Pienso que no tiene nada que ofrecer como buena historia, y esa es la razón más fuerte, no puedes compararla con series geniales como “Malcolm el de en medio” o “Juego de Tronos”. Lo que la industria ya comienza a vender son clips juntos unos a otros donde solo suceden cosas (para hacer hipérbole), una secuencia de acciones que finalmente resulta en lo más obvio.
Eso justamente está sucediendo con mucho del cine que viene importado de Hollywod, las historias ya no son geniales, son para seguir produciendo, como esas de “Megalodón 2” o “Rápidos y furiosos 10”. Parece que ser interesante ya no importa, con
tal de tener algo en la cartelera.
Pero tampoco trato de hacerme el interesante opinando sobre esto, yo sí creo que la gente necesita estimular su cerebro. No maldigo a quien no lee mucho, estaría loco, pero si tenemos acceso a las plataformas de streaming y al cine pues veamos cosas chidas.
Por ejemplo, en Netflix en verdad hay cosas muy geniales, como los volúmenes de “Love, Death & Robots”, más específico, “Piezas únicas”, en el primer volumen, “El gigante ahogado” en el volumen 2. Pero todo esto, por supuesto queda rebasado con lo mejor de la literatura. Hace unos días en Puebla, en la capital, como en muchas capitales de otros estados rindieron homenaje a “Pablo Neruda”, declamando sus bellos poemas, y estoy seguro de que la gente se fue como hucha llena, más que si se hubiera quedado en casa viendo "La Rosa de Guadalupe".
Si les sirve de algo lo que aquí dije, busquen en el cine películas buenas, hay muchas, y si sólo leen no desprecien el cine, hay muchas cosas buenas. Y todos en medida de lo posible, conozcamos más sobre literatura.
Yo creo que se vale lo que hasta ahora he dicho, pero lo no que se vale es presumir que nunca se ha leído un libro y que nunca se ha exigido al seso un reto de inteligencia mayor, todo lo superficial es pernicioso, no podemos conformarnos con tan poco. ¡Podemos ser más!
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