El próximo domingo 10 de abril se llevará a cabo el ejercicio de la revocación de mandato. Como ya lo había comentado en una colaboración anterior, esa jornada electoral será la primero en su tipo en México, organizada por el Instituto Nacional Electoral (INE) en el cual podrán participar todos los mexicanos que tengan su credencial de elector vigente.
Para que el proceso sea válido deberá haber la participación de, por lo menos, el 40 por ciento de la lista nominal, que corresponde a 37 millones de mexicanos.
Para nadie es desconocido que, la revocación de mandato no es la reacción de la ciudadanía a una crisis o deslegitimación del gobierno mexicano, sino que es impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador y su partido Morena.
Por ello que vemos cuadrillas de promotores del voto, a favor de que AMLO no se vaya, recorriendo todo el territorio nacional y a su paso tapizan postes, bardas, espectaculares y repartiendo miles de volantes con publicidad que llama a votar en la consulta del próximo 10 de abril.
Y aunque el propio presidente aseguró, bajo palabra de honor, que, si pierde la consulta, renunciará a la presidencia de México, aun si no participa el 40 por ciento de la lista nominal de electores, como lo indica la ley para que el ejercicio sea considerado vinculatorio, no debemos dejarnos engañar con esta farsa democrática.
Así vemos como todo el Gobierno federal viola la constitución mexicana y utiliza los programas sociales, como las vacunas, las becas, apoyos a adultos mayores para coaccionar el voto rumbo a la consulta de revocación de mandato. Una prueba más es la reciente declaración de AMLO en la que señala que la eliminación del programa de Escuelas de Tiempo Completo (ETC) permitirá que los recursos se entreguen de manera directa y sin intermediarios a las sociedades de madres y padres de familia, quienes podrán utilizarlos a conveniencia de los alumnos, lo que significa que, de nueva cuenta, los programas sociales se usan por el partido en el poder para obtener seguidores que voten por su propuesta política.
Aunque la convocatoria del proceso de revocación de mandato señala que debe suspenderse toda propaganda gubernamental, el oficialismo sigue con la promoción y el argumento de que López Obrador impulsa una política en beneficio del pueblo.
La Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) analiza declarar inaplicable el decreto interpretativo sobre propaganda gubernamental aprobado por el congreso, y confirmar, de manera preliminar, que Morena ha violado la Constitución, el coordinador de los diputados de Morena, Ignacio Mier Velazco, asegura que su partido no ha incumplido la ley, sino que el órgano electoral ha tenido una interpretación errónea de los conceptos.
Desde ahora es evidente que, sea cual sea el resultado, este servirá para denostar por parte de la Cuarta Transformación al INE por su fracaso en la consulta popular por la escasa participación en las urnas por parte de la población.
No hay duda de que AMLO busca, por todos los medios, apropiarse del INE y cooptar o desaparecer todos los organismos autónomos e independientes que fungen como contrapeso al Poder Ejecutivo federal.
Hace unos días, el presidente informó que tras realizarse la consulta de revocación de mandato presentará su iniciativa de reforma electoral en la que propondrá que los consejeros y magistrados electorales sean electos mediante el voto directo de los mexicanos.
No hay duda, el objetivo de su reforma es aumentar las posibilidades de que Morena continúe en el poder y por ello no quiere un INE imparcial y bien acreditado.
Ante ello, el Movimiento Antorchista Nacional hace uno atento llamado a todos los mexicanos para que nos unamos a defender al INE, sin perder de vista que el organismo es patrimonio del pueblo y su defensa es vital para que siga habiendo democracia en nuestro país.
No nos vayamos con la finta y mejor preparémonos para nuevas luchas que, en última instancia, nos llevarán a la construcción de una sociedad más justa para todos.
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