De esto se derivaron las impugnaciones de dicha justa electoral, promovidas por los candidatos perdedores de Morena y el PAN, aun sabiendo que sus argumentos para impugnar están totalmente fuera del tiempo que marca la ley. 

Toda esta campaña sucia y mañosa orquestada por el Gobernador Miguel Barbosa y de los candidatos perdedores de Morena y el PAN, quienes no son más que títeres del gobernador, es con la intención de arrebatarle el triunfo a los candidatos antorchistas para lograr un poder único en todo el estado, al estilo morenista, atropellando la democracia, los derechos humanos y pisoteando la constitución de todos los mexicanos y que él mismo está obligado a respetar.

Es aquí donde debería entrar la mano imparcial del Instituto Estatal Electoral (IEE), quien se define a sí mismo como “un organismo público, que goza de autonomía en su funcionamiento e independencia en sus decisiones, con personalidad jurídica y patrimonio propios. Sus atribuciones son: organización, dirección y vigilancia de las elecciones”. 

Si esto es así; entonces ¿cómo es que el IEE de Puebla ha permitido que el gobernador morenista de este estado, Miguel Barbosa atropelle la democracia de los habitantes de Santa Clara Ocoyucan y Huitzilan de Serdán? Es en este caso donde se debe ver claramente la mano del juez imparcial del IEE, quien no debe bajo ningún motivo realizar la voluntad y los caprichos de ningún gobierno del color que sea, para que así, entonces sí, se pueda presumir de una autonomía e independencia con la que se deben vigilar las elecciones.

Estamos ante un panorama difícil y donde la ley no se cumple, pero los antorchistas de todo el país respaldamos la lucha de los poblanos, porque estamos convencidos y hemos comprobado que los candidatos antorchistas siempre están al servicio de la clase trabajadora, de los pobres de nuestro país y  por eso no dejaremos que el gobierno morenista atropelle los derechos de los ciudadanos. Seguiremos denunciando a lo largo y ancho del país para que se ponga un alto a las injusticias cometidas por el gobierno morenista poblano.