Guadalupe, Zac.- Osvaldo Avila, dirigente del Movimiento Antorchista declaró que en todos los rincones de Zacatecas siguen convocando a la gente a mantenerse unidos y dispuestos a luchar por una vida digna, esto en relación con la gira de trabajo que realizó en colonias y comunidades de Guadalupe y otros municipios del estado como Jalpa, Fresnillo y Vetagrande.
En este sentido afirmó que la actividad política y de gestoría que desarrolla antorchismo a lo largo y ancho del país por cerca de 48 años está amparada en las leyes, para lo cual cumplen los requisitos legales como formular por escrito las peticiones de manera pacífica y respetuosa ante los funcionarios de los tres niveles de gobierno.
Sin embargo, con la llegada de Morena al poder se hizo más difícil y peligroso el trabajo organizativo, pues se reafirmaron viejos argumentos como: “no puedo atenderlos porque no tengo recursos” y poniendo de moda frases como: “atenderé sólo peticiones individuales, no se atienden intermediarios”.
Mientras que en otros lugares simplemente se apuesta al cansancio de los peticionarios para que desistan, pero también se agregan la descalificación y calumnia, hasta llegar a la represión abierta con las fuerzas policiacas que son monopolio del estado, que en esas circunstancias dejan de velar por la seguridad de los ciudadanos para volverse en su contra.
“Por ende, los zacatecanos no podríamos escapar a la política nacional”, y a casi un año de la administración estatal y de los gobiernos municipales, el tratamiento que se le dio a las peticiones expuestas en el pliego petitorio respectivo no ha variado mucho: “se dan constantes reuniones con trato amable, pero a la hora de solicitar la materialización es donde ya no hay avances”
El líder social dijo que en algunos casos, donde se dio la reelección de las autoridades municipales, “a pesar de que se trata de acciones expuestas desde el 2018 aún estamos en espera de respuesta”.
Finalmente Avila Tizcareño afirmó que con el marco legal referido, se da cuenta que su intención no constituye ningún exceso, “además de que las demandas son plenamente justificadas al tratarse de acciones elementales”, por lo que tomando en cuenta que la ley los ampara, esperamos que no se repita lo acontecido en otros momentos y haya respuesta a las legítimas solicitudes del pueblo organizado, “e no ser así sólo quedará como alternativa la lucha firme y valiente por una vida digna”.
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