Nicolás Romero, Estado de México.- El regreso a clases se ve ensombrecido por dos fenómenos que tienen a los mexicanos sumidos en la zozobra. El pasado lunes 29 de agosto regresaron a las aulas poco más de 29 millones de niños que cursarán la educación básica; a estos se le suman 5 millones de estudiantes de nivel medio superior y superior. Sin duda alguna es una cifra importante y digna de celebrarse. Sinceramente les deseamos éxito a niños, adolescentes y jóvenes en este nuevo ciclo escolar.
Para el señor Miguel Aceves, padre de familia de dos infantes que van a uno de los tantos centros escolares que hay en la ciudad capital, señaló que hay dos fenómenos que actualmente afectan a todos los mexicanos.
1)La creciente inseguridad en el transporte público: los robos, los asaltos en los alrededores de las escuelas, el incremento en el consumo de drogas y las escenas de violencia (asesinatos masivos, incendio de negocios, autos y camiones), son el contexto en el que millones de estudiantes tendrán que ir a la escuela, poniendo en riesgo su integridad física. Todas estas situaciones revelan el fracaso de la política en materia de seguridad seguida por López Obrador, sus “abrazos y no balazos” tienen sumido al país en la violencia.
2)El aumento de los precios obliga a los padres de familia a gastar más dinero en este regreso a clases: la inflación ha hecho que los precios de las libretas, lápices, libros, uniformes, etc., aumenten significativamente. Se estima que este regreso a clases costará a los padres de familia 3 mil 320 pesos por estudiante, por lo que una familia con un ingreso promedio de dos salarios mínimos (un mil 210 pesos semanales; o sea, 4 mil 840 pesos mensuales) y dos hijos, sufrió y seguirá sufiendo lo indecible para enfrentar estos gastos. Una vez más la inflación castigará a más no poder a las familias con menos recursos. Las becas Benito Juárez en nada ayudarán, pues está demostrado que los recursos de dicha beca son insuficientes. Es, pues, otra política fracasada del gobierno de López Obrador y su partido Morena.
Adicionalmente, un millón 225 mil maestros, con sus precarios salarios, estarán sometidos a la presión de garantizar que las aulas estén en condiciones adecuadas para recibir al estudiantado: que haya electricidad, bancas suficientes, que los patios y sanitarios estén en buenas condiciones. Además, los profesores también serán presos de las muchas dudas que ha generado la “Nueva Escuela Mexicana”, pues no solo impactará en los planes y programas de estudio sino que también trastocará la situación laboral de los maestros. A López Obrador y su partido no les interesa la educación y mucho menos los maestros.
Para poder resolver estas situaciones cada vez se hace más urgente que el pueblo cobre conciencia de la necesidad de organizarse para cambiar el rumbo de nuestro país. Se vuelve imprescindible que la comunidad escolar se una y luche para que los mexicanos vivan en un ambiente de armonía y tengan la posibilidad de recibir educación de calidad.
A eso los invita Antorcha, a educarse, organizarse y luchar para que juntos construyamos un país lleno de oportunidades para todos los mexicanos.
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