Inicia un nuevo año y como la mayoría de nosotros sabe el primer mes después de pasadas las fiestas decembrinas, después de los gastos, llega la crisis en la llamada cuesta de enero, cuando se dan los mayores gastos y deudas en mayor medida que los demás meses del año. Este fenómeno económico afecta sobre todo al pueblo pobre, pero además a esto se suma el tema del alza de los precios de los bienes y servicios, es decir de la canasta básica.
En las últimas semanas hemos sido testigos del incremento en los precios de los productos, la inflación registrada, justo al inicio del cuarto año de gobierno del presidente López Obrador, pero que además es la más grave superando a los sexenios que tanto ha criticado. Esto trae como consecuencia una disminución o caída del poder adquisitivo de la población, afectando principalmente a la gente que sobrevive al día, quienes sí deben apretarse el cinturón comprando lo más elemental con las marcas de menor calidad y en porciones menores para llevar algo que comer a su mesa.
La mayoría de los mexicanos hemos denunciado estos incrementos en los precios de la canasta básica, puesto que cada vez es menor la cantidad de productos que logramos comprar con el mismo dinero. En los países donde predomina una economía capitalista o neoliberal como México, a este fenómeno se le denomina: inflación.
Las mercancías que más subieron son: el gas doméstico natural a 28.44%, siendo el que más utilizan las amas de casa. La carne de res aumentó un 18.8%, el maíz un 25.4%, siendo las tortillas uno de los productos básicos en la dieta de los mexicanos más pobres. También aumentó la gasolina magna a un 14% respecto al cierre de 2020, variación que es el doble de la inflación al cierre del 2021. Todo esto a pesar que como candidato Andrés Manuel López Obrador (AMLO) prometió que una vez que llegara al gobierno, el litro de gasolina costaría 10 pesos y recientemente dijo que no subirían las gasolinas por arriba de la inflación resultando lo contrario, y un largo etcétera.
La inflación en nuestro país se ubicó en 7.37% de la tasa anual al cierre del 2021, según datos del INEGI, alcanzando su nivel más alto en los últimos 20 años, la mayor registrada fue en diciembre del 2000, que fue del 8.96%. Las proyecciones fijadas por el Banco de México, se preveía la inflación en 3%, desgraciadamente, se supera la mayor inflación de la administración anterior de Enrique Peña Nieto en diciembre de 2017, que fue de 6.77%, asimismo, superó la de Felipe Calderón que, en el mismo periodo, alcanzó el 6.53%.
Los antorchistas hemos denunciado puntualmente estos hechos, pues el gobierno de AMLO ha sido peor que sus antecesores, aunque en sus mañaneras diga todo lo contrario y sea secundado por su ejército de comunicadores en las diferentes plataformas o medios de comunicación.
A la mitad del sexenio morenista se encamina a ser uno de los peores gobiernos de la historia. Sólo hay que observar y analizar detenidamente los datos y números que la propia administración morenista registra y difunde, tal como en este caso la inflación que ha disparado los precios de la canasta básica, perjudicando a los más pobres del país, mientras a ellos sólo les interesa estar en el poder y los demás que se las arreglen para sobrevivir, así se percibe que nos espera un año complicado.
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