Nicolás Romero, Méx.- En México, uno de los problemas sociales que más se agudiza como consecuencia de la desigualdad que impera dentro del capitalismo es la falta de vivienda que, de acuerdo con el Coneval, en 2018 afectaba a más de 73.6 millones de personas a nivel nacional y aproximadamente a 850 mil mexiquenses.
Esto se debe a la inequitativa distribución de la riqueza social que se concentra en pocas manos, ya que según la Oxfam esto “es el resultado del aprovechamiento de distorsiones del mercado por parte de unos pocos, a costa de negar derechos sociales, económicos y laborales a millones de personas”.
Lo que se traduce en que “el hombre más rico de México cuenta con una fortuna superior a la de la mitad más pobre de la población (Carlos Slim: 93,000 MDD, fuente Forbes 2023), en un país de más de 130 millones de habitantes”, de los cuales según el Coneval, entre 2018 y 2020, la población en situación de pobreza aumentó en 7.3 por ciento, al pasar de 51.9 a 55.7 millones de habitantes, y la población en situación de pobreza extrema, que vive con menos de 100 pesos diarios, creció 24.1 por ciento, al pasar de 8.7 a 10.8 millones.
Por tanto, la adquisición de una vivienda, de acuerdo sólo es accesible para quienes perciben más de cinco salarios mínimos, cifra que representa en nuestros días más de 15 mil pesos mensuales y que deja afuera del mercado inmobiliario a 6 de cada 10 trabajadores en México, pues más de 14 millones gana solamente un salario mínimo y cerca de 20 millones gana lo de dos salarios mínimos, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del Inegi 2021.
Lo que se traduce en la inequitativa distribución de la riqueza y conlleva a que millones de obreros, empleados y trabajadores informales, por su pobreza, al ganar uno o dos salarios mínimos, que el sistema les niegue la posibilidad de comprar un terreno en donde construir su hogar o la adquisición por medios oficiales de una casa dúplex del Infonavit.
Grupo de solicitantes de vivienda, la opción para los pobres
Ante esta injusticia, el Movimiento Antorchista, a lo largo de 45 años, en su lucha contra la pobreza generada por la inequitativa distribución de la riqueza, se ha dedicado a unir, organizar y educar políticamente al pueblo trabajador, y amparado por el artículo cuarto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos que establece “que toda persona tiene derecho a disfrutar de vivienda digna y decorosa”, ha gestionado ante los gobiernos estatales e incluso entre particulares la adquisición de terrenos a bajo costo para que miles de pobres en todo el país puedan acceder y construir una vivienda.
Tan solo en el noroeste mexiquense, señaló el dirigente social, Héctor Javier Álvarez Ortiz, el grupo de solicitantes de vivienda conformado por el Movimiento Antorchista ha impulsado que más de dos mil 600 familias hayan adquirido de forma legal un lote a bajo costo, para ello todo aquel que no cuente con un predio, sea padre de familia y tenga un trabajo humilde, puede inscribirse en este grupo social, al acudir todos los domingos a las 9 de la mañana a la colonia Espartaco en Nicolás Romero, cuya meta es la consolidación de un patrimonio familiar que impulse el desarrollo integral de sus hijos.
Pero el trabajo de Antorcha no se queda ahí, durante 35 años su labor de gestión ha contribuido para que más de tres mil 600 familias de las colonias populares, como Clara Córdova Morán, Wenceslao Victoria, Bosques de la Colmena, Ricardo Flores Magón, Ampliación Loma de la Cruz, Azotlán, Fraccionamiento el Potrero, Bosques de San Martín y Morelos, de los municipios de Nicolás Romero y Atizapán de Zaragoza, consoliden su patrimonio al contar con una escritura pública certificada por el Instituto Mexiquense de la Vivienda Social (IMEVIS) y avalada por el Gobierno del Estado de México.
Diligencia que la organización social mantiene permanentemente al acordar con el IMEVIS la posible inmatriculación, regularización y escrituración de las comunidades de: Cahuacán, San José el Vidrio, Magú, Transfiguración, San Miguel Hila, Progreso Centro, Capulines, Jiménez Cantú 4ta y 5ta sección, Conchas, Zaragoza, Independencia, Morelos, La Joya, Biosistemas, Juárez Centro, Hidalgo, San Idelfonso, Vista Hermosa, Buena Vista, San Isidro La Paz, Loma de la Cruz, Vicente Guerrero, Benito Juárez Barrón, Francisco Sarabia, Francisco I. Madero, Sitio 217, Granjas Guadalupe, Bosques de la Colmena, Monte Sur del Lago, Ampliación Granjas, Pueblo Viejo, La Colmena y Campestre.
“La adquisición de terrenos a bajo costo para las familias pobres, así como la regularización y escrituración de las comunidades populares en el noroeste mexiquense y en todo el país, es un paso significativo en la lucha por la transformación del entorno social y la consolidación de un cambio estructural que generará, al contar todos los mexicanos con trabajo, salarios bien remunerados, una política fiscal progresiva y la reorientación del gasto social ejercido en educación, salud y cultura, una mejor calidad de vida para el pueblo trabajador”, aseguró el líder social.
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