Ha pasado más de un año que el mundo está enfrentándose a la pandemia del SARS- CoV-19 y muchos de esos países han salido victoriosos, cosa que no está sucediendo en México, por el contrario, ni siquiera se le da la atención mínima requerida para enfrentar la pandemia, ya hemos superado los 321 mil decesos por esta causa. Y la pregunta que la mayoría de los docentes se hace es: ¿por qué el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha decido reiniciar las clases presenciales (a tres meses de concluir el ciclo escolar 2020-2021), y sin un buen plan de vacunación para los estudiantes, docentes y padres de familia?
La penosa decisión de nueva cuenta del presidente Andrés Manuel López Obrador nos deja preocupados, cuando menciona que todos los estudiantes del país, ya deben regresar a las escuelas; la duda radica en que, la Secretaría de Educación Pública y el Gobierno federal, no han dicho, no han plasmado y tampoco han publicado un plan de vacunación que garantice que antes de iniciar las clases presenciales, todos, pero todos ya se encuentren vacunados.
Los maestros sabemos las importancia y urgencia de la reapertura de las escuelas, de eso no cabe la menor duda, sin embargo, hay que tener presente que niños y adolescentes no han sido contemplados dentro de un plan de vacunación, ellos tienen derecho a ser inmunizados, sin importar si son o no población de bajo riesgo, de igual forma contemplar a los padres de familia. De acuerdo con la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) 2018 ellos representan el 50.8 por ciento de la población entre los 6 y 19 años.
En su conferencia matutina de la semana pasada, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, dijo que ya se aceleró la llegada de vacunas a México, ya se ha aplicado 4 millones 737 mil 622 dosis. Pero ojo, en México, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI 2020) la población ascendió a 126 millones 14,024 habitantes. México, lo que equivale que han sido vacunados 3.76 personas de cada 100 y el porcentaje de la población con esquema completo de vacunación es del apenas 0.5 por ciento. Si el Gobierno de López Obrador mantiene el ritmo actual de vacunación contra la covid-19 y tomando en cuenta que somos poco más de 126 millones de mexicanos, tardaría 8 años y nueve meses en vacunar a toda la población, según la proyección del periódico estadounidense The New York Times.
A decir de Marcos González Díaz , corresponsal de BBC News Mundo en México, señala que “las decisiones del Gobierno federal con respecto a la pandemia son un daño irreparable” y la mexicana Laurie Ann Ximénez-Fyvie, microbióloga y doctora en Ciencias Médicas por la Universidad de Harvard, criticó “con dureza la actuación del subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, de quien asegura que en estos meses se ha dejado llevar por criterios más políticos que científicos sin dar una solución al pueblo mexicano”.
Y entonces que esperar si la Secretaría de Educación Pública, la Secretaría de Salud y el Gobierno federal, no tienen un buen plan de vacunación, y mucho menos se han puesto a pensar en el daño que va causar el reabrir las aulas sin antes haber aplicado la vacuna. ¿Qué es lo que buscan nuestras autoridades, acaso, que se incremente el número de muertos?
El regreso presencial será un verdadero reto, y los que van a exponer su vida, son los alumnos, maestros, personal administrativo y padres de familia. El primer reto a vencer es el recurso disponible a invertir al regreso a clases, pues el 70 por ciento se encuentra en las manos del Gobierno federal. El segundo reto es la aplicación de la vacuna para cada alumno, maestro y padre de familia antes que inicie las clases. Y el tercer reto arreglar el deterioro de las aulas, que a más de un años, no les han dado mantenimiento. Así lo menciona el estudio publicado en 2019 por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) que muestra que el 81 por ciento de los inmuebles están ubicados en construcciones con condiciones mínimas de sanidad, también la matrícula de 25 estudiantes por docente sobrepasa la cantidad de alumnos recomendada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos.
Los maestros antorchistas sabemos el grado de prioridad que tiene el regreso a clases, pero también, no olvidamos que los niños y niñas del país tienen derecho a que en su regreso a clases cuenten con aulas más seguras. Es por ello que exigimos a las autoridades educativas y al gobierno federal, realicen un buen plan de vacunas para todos. Y que de no hacerlo que toda la responsabilidad caiga sobre el presidente López Obrador, por necio e incompetente. Vale.
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