Parral, Chihuahua. El señalamiento y la crítica se recrudeció cuando la Secretaría de Seguridad dio a conocer, el pasado 20 de junio, la cantidad de 121,634 homicidios dolosos. La comparación de las cifras se hace inevitable dado el énfasis que el presidente, Andrés Manuel López Obrador hizo a las igualmente fracasadas políticas de seguridad pública de administraciones anteriores.
Con los números mencionados se rebasó la registrada en la administración de Felipe Calderón Hinojosa, 120,170 respectivamente. Los asesinatos promedian 94 diarios y 3,000 por mes, restan aún 840 días de gestión obradorista a la fecha de redacción de esta nota.
Al sur del estado de Chihuahua, en el municipio de Guadalupe y Calvo se ha registrado una extraordinaria ola de migración ocasionada por la inseguridad de la cual las familias campesinas e indígenas han sido las más vulnerables.
La Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) dio a conocer el desplazamiento oficial de 300 personas durante el periodo de junio de 2021 a junio de 2022. El reporte señala que el municipio no es el único en padecer este fenómeno, pero sí es el más visible en la entidad.
“En ocasiones son víctimas del daño colateral de los enfrentamientos que ocurren en comunidades donde no se tiene presencia alguna de autoridades", expresó Luis Salcido, visitador de la CEDH.
El abandono e inoperancia efectiva de las autoridades de todos los niveles de gobierno no tiene precedentes. La zona conocida como “triángulo dorado” fue visitada recientemente por AMLO en la cual tampoco hubo un pronunciamiento o declaración de un plan emergente para combatir el rezago, vulnerabilidad y pobreza de los habitantes.
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