Hace unas semanas el desempleo a nivel mundial llegó a sus niveles más altos. La desesperación de quienes carecen de un empleo formal es enorme, sin embargo, los gobiernos no han podido o no han querido resolver. Ningún estado de la república queda exento, mientras el Gobierno Federal, encabezado por Andrés López Obrador y la llamada Cuarta Transformación, solo ve como en México va creciendo el índice de desempleo, sin poner en marcha políticas adecuadas para que esto cambie a favor de la clase humilde. Quintana Roo no queda fuera de este contexto.

Es lamentable ver que el Gobierno federal no haga caso a lo que la gente realmente necesita, y en estos momentos en que atraviesa la quinta ola de la pandemia de covid-19, se ve el despido masivo de trabajadores, el cierre de empresas y nulos apoyos; da mucha tristeza. La Organización Internacional del Trabajo OIT dió a conocer sus perspectivas sobre el comportamiento del empleo mundial, 207 millones de personas desempleas para el cierre del 2022, superando los 186 millones del año pasado.  

Para México el panorama no pinta nada bien en el desempleo, pues al cierre de 2020 y 2021, fue del 3.5 por ciento nacional, y para 2022 debiera ser lo mismo; sin embargo, no lo es, la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) estima un aumento del 4 por ciento; pero no es todo, pue aparte del desempleo tradicional existen también las personas que están buscando trabajo y no lo han logrado por diversas causas, a las cuales se les denomina “desempleo escondido”.

Quintana Roo es dependiente del turismo extranjero, pero la pandemia le pegó fuerte. En México el desempleo en el primer trimestre de 2022 es de 2 millones de personas; además del desempleo informal y el desempleo escondido.

El turismo incrementó un 46 por ciento, no obstante, en zonas como Cancún, Playa del Carmen y Tulum la pérdida del poder adquisitivo del peso dará un duro golpe a las familias vulnerables, las más pobres del estado. 

El Gobierno de Quintana Roo apuesta al sector de servicios, pero comete un brutal error, pues es un estado con tierras productivas que no se han sabido aprovechar. La distribución desigual entre el sector turismo-servicio y campo es muy amplio, tan solo como ejemplo: en primer lugar tenemos empleados de ventas, despachadores y dependientes de comercios, con 46 mil 190. En segundo lugar, con 31 mil 959, son los conductores de autobuses, camiones, camionetas, taxis y automóviles de pasajeros; también hay 30 mil 83 meseros; 28 mil 775 comerciantes en establecimientos, y 27 mil 678 albañiles, mamposteros y afines; nada del campo. Tal es el grado de desatención por las autoridades que el desempleo informal es un 44.4 por ciento, según la Secretaría del Trabajo y Previsión Social en 2022, casi alcanzando al empleo formal.

El Gobierno federal tampoco ha hecho la gran cosa para atender esta situación que todo el país atraviesa, los recortes a cada Presupuesto de Egreso de la Federación son abrumadores, y para nuestro estado ha sido muy difícil, pues nos quedamos sin inversión al campo, sin la creación de trabajos, y sobre todo agudiza la pobreza al no aplicar la correcta distribución del recurso federal recorte que fue del 45 por ciento para el 2022. INCOMEX, manifiestan preocupación por la reducción de casi 99 por ciento en términos reales al rubro de micro, pequeñas y medianas empresas productivas y competitivas, el cual pasó de 3 mil 504 millones de pesos en 2021, a sólo 240.6 millones de pesos en 2022. 

Municipios tan grandes como Cancún y Playa del Carmen presentan un incremento superior al 40 en el desempleo, a consecuencia de esto los 11 municipios casi duplicaron su situación de pobreza, así lo demuestra las últimas cifras la Secretaría del Bienestar, pasandon de 474 mil 800, en 2018, a 892 mil 875 en 2020. Ver como muestras a los municipios llenos de vida y riqueza, su cara bonita; mientras la gente está desempleada y casi llegando a la miseria, donde cientos de personas son despedidas, pues no existe un programa que los apoye.

Como ven este es el panorama que pinta para nuestro estado, donde las autoridades federales y estatales no les interesa el bienestar de nosotros, de la gente que busca la manera de sobre vivir, que busca un bienestar más digno. Las políticas económicas que hasta el momento ha implementado el gobierno federal, AMLO solo favorecen a unos cuantos, mientras el cinturón de pobreza ha aumento en lo ancho y largo del país.

Cada vez nos alcanza menos para la canasta básica, ya no tenemos un sistema de salud para todos, y la educación solo es para los que pueden pagarlo. Creo que las medidas que toman los que están el poder no están dando los resultados a favor del humilde. Es momento de levantar la voz.