Como cada año, los antorchistas del país hemos acudido a Tecomatlán, cuna de nuestra organización, el Movimiento Antorchista Nacional, para reivindicar nuestro compromiso con nuestros mártires antorchistas.
Quienes asistimos tuvimos la oportunidad de escuchar el mensaje de nuestro dirigente nacional y líder, el maestro Aquiles Córdova Morán, quien nos recuerda la importancia de estos eventos anuales y nos expone su análisis acerca de los acontecimientos más recientes, y cómo nos afectan a quienes trabajamos para organizar y poner a luchar al pueblo trabajador.
La tarea de los antorchistas será la de fortalecer nuestra lucha y exigir a la nueva administración federal que cumpla sus promesas.
Esta colaboración sería un intento de transmitir ese mensaje a todos mis compañeros antorchistas de Campeche.
Nuestros mártires, nos recordó el Maestro Aquiles, son las personas que estuvieron en nuestras filas y ya fallecieron, unos caídos bajo las balas de los caciques, o por negligencia médica, otros por causas naturales y otros por fatales accidentes; pero todos con una característica principal: permanecieron en las filas de Antorcha, luchando hasta su último aliento por la causa del pueblo trabajador.
Ese es el principal ejemplo (no el único) que nos legaron y es nuestro deber cada año recordarlos y comprometernos a seguir ondeando la bandera que ellos ya no pueden; sostuvieron la bandera mientras las fuerzas se los permitieron, nos la pasaron, y es nuestro deber no dejarla caer, sino ponerla en alto con más ganas y empeño.
Este evento, pues, significa el compromiso de no abandonar la lucha, de seguir adelante con todas nuestras energías e inteligencia, hasta que nos llame el destino y se la podamos pasar a los que vienen detrás, como lo hicieron ellos.
En nuestra realidad natural y social, esa es la única forma de lograr la continuidad y, por ello, la eternidad. Por eso nuestros caídos no han muerto del todo, pues seguirán vivos en nuestra lucha, mientras los recordemos y sigamos luchando; por eso decimos que morir por Antorcha no es morir, morir por Antorcha es vivir.
“Por eso –dice el maestro– es importante traer a la mente y traer al corazón el recuerdo de quienes no desertaron a lo largo de la carrera”.
No lo debemos olvidar, compañeros antorchistas, que por eso cada seis de junio conmemoramos a quienes nos pusieron el ejemplo y refrendamos nuestro compromiso de seguir adelante con la lucha.
En la segunda parte de su discurso, el maestro se refirió a las recién realizadas elecciones en nuestro país, en las que los resultados le entregan nuevamente el poder de la nación al partido del aún presidente en funciones, Andrés Manuel López Obrador. El maestro nos explicó, y yo trato de puntualizarles, de la siguiente manera:
Es evidente el fracaso del Gobierno de AMLO y el retroceso que significó en importantes rubros del país, en detrimento de los más pobres, como es el caso de la salud, pues no sólo no estamos como en Dinamarca, sino con serios retrocesos en comparación a las administraciones anteriores por la falta de medicamentos.
Es también el caso de la educación, pues si antes estábamos estancados, ahora, con AMLO, el retroceso es de varias décadas. También estamos peor que antes en seguridad, pues su administración ha sido la más violenta de los tiempos actuales, y también fracasó en la lucha contra la pobreza, pues los ricos se hicieron más ricos y los pobres más pobres, a pesar de los programas de entrega de dinero en efectivo, los cuales, además, fueron posibles gracias a los recortes en todos los demás rubros (los mencionados y los otros) y explican así la posibilidad de haber entregado esas “ayudas”.
Tales “apoyos”, agreguemos, se manejaron de manera muy opaca, es decir, hubo mucha corrupción y desvío de dinero del erario, de lo cual se beneficiaron algunos pero no el pueblo. Pese a ello, el resultado electoral les favoreció, incluso más contundentemente que en 2018.
Esto se explica –nos dice el maestro– por cuatro factores principales:
1. La entrega de apoyos monetarios, con un padrón de más de 28 millones de beneficiarios, según datos oficiales, a los que se les dio un indudable y criminal uso electorero.
Todos lo debemos ver y aceptar, el hambre del pueblo fue factor determinante para que, más por miedo y chantaje que por agradecimiento o conciencia política, votaran por la continuidad de estos programas.
2. La campaña anticipada que con todos los recursos de la nación realizó el partido de la candidata oficial, quien desde antes de pedir licencia se desentendió de sus obligaciones al frente de la Ciudad de México.
3. La ausencia de una verdadera oposición, de otra alternativa contra la cual contrastar la decisión del electorado, ya que la otra opción se declaró desde el principio y de manera indudable como representante de la extrema derecha y nunca ofreció un proyecto de gobierno serio y bien estructurado.
4. Como siempre, las falsas y escandalosas promesas de la candidata oficial, que no se detuvo, como no lo hizo AMLO, para prometer cosas que no se van a cumplir, ni siquiera intentándolo de verdad, pues las mentiras les han funcionado para sembrar en los mexicanos la esperanza de la justicia en contra de quienes han abusado del poder y en favor de los más desprotegidos.
Pero todos vimos cómo AMLO favoreció a la tantas veces criticada mafia del poder, y se olvidó del pueblo trabajador, a pesar de sus promesas y juramentos.
Pero esto, continuó explicando el maestro, no se va a poder sostener en este sexenio, pues el destino alcanzará a la política social y fiscal, de manera que, si no se les cobran más impuestos a los más ricos, como no lo quiso hacer AMLO, ni lo va a hacer Claudia Sheinbaum.
Ya no les van a alcanzar los recortes a los demás rubros (a los que ya no se les puede recortar más), por lo que tendrán que empezar a sacrificar sus programas sociales y ni así podrán sostener el gasto, a no ser que se endeuden más, como lo hizo AMLO en este último año fiscal.
Por eso, la tarea de los antorchistas será la de fortalecer nuestra lucha y exigir a la nueva administración que cumpla sus promesas. Por ello:
“Antorcha saldrá con más fuerza a las calles a exigir al gobierno de Sheinbaum que cumpla sus promesas de campaña; los próximos seis años, Antorcha dará una lucha más aguerrida por defender al pueblo de México”.
Esa es la conclusión y esas son las tareas para todos nosotros; debemos entregar nuestras solicitudes, fortalecer la gestión y la lucha que, ya ustedes lo saben, es la que termina desatorando y resolviendo los problemas de los más necesitados.
El camino es, nuevamente, la lucha organizada, legal y decidida por la solución de las demandas de los más necesitados.
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