Las colonias agremiadas al Movimiento Antorchista Nacional, dentro del territorio hidrocálido, han trabajado desde hace poco más de 20 años, de forma conjunta y organizada, para superar las necesidades que aquejan a sus habitantes.
Comunidades que han tenido fuertes carencias, mismas que se han superado paulatinamente en los diversos municipios de la entidad, gracias a la participación e interés de sus integrantes y al decidido respaldo del Movimiento Antorchista a través de sus líderes sociales que se esfuerzan diariamente por atender problemas de escrituración, servicios, apoyo a la vivienda, educación, salud; concretando así numerosos proyectos que han beneficiado significativamente a sus habitantes.
La fundación y desarrollo de la infraestructura urbana de colonias en diferentes municipios como Fraternidad en San Francisco de los Romo, Solidaridad en Jesús María, La Antorcha en Aguascalientes y Unión Antorchista en Calvillo, por referir sólo algunas, hoy son botones de muestra del avance obtenido por el trabajo de gestión que encabeza el Movimiento Antorchista en Aguascalientes, cuyo fin principal es elevar la calidad de vida de las familias más humildes del estado, organizándolas y educándolas, con miras a obtener las herramientas necesarias para exigir respeto a sus derechos sociales, mismos que constantemente son ignorados y desatendidos por las autoridades de gobierno.
Al respecto Rosy Montoya, líder social antorchista de la colonia Fraternidad, mencionó el trabajo que como movimiento social realizan dentro de las diferentes comunidades, preocupándose por el bienestar material y espiritual de sus habitantes, señalando la importancia de la participación activa de los habitantes en el mejoramiento de sus condiciones de vida, a través de las reuniones que se realizan semanalmente de forma seccional para todos los afiliados al antorchismo en Aguascalientes, ya que en éstas se exponen las necesidades que se detectan en las colonias y que con mayor frecuencia se refieren a la carencia de servicios públicos como drenaje, pavimentación, redes de agua potable y electrificación, guarniciones y banquetas, áreas verdes, pinta de espacios públicos olvidados por los municipios por bastantes años, limpieza de lotes baldíos que son utilizados como basureros y que se convierten en focos generadores de plagas que afectan la salud, hasta apoyos como la entrega de materiales para la construcción, ampliación y mejoramiento de la vivienda.
“En lo personal –dice Rosy Montoya- me satisface mucho el trabajo que realizó en el Movimiento Antorchista, ya que, además de que me permite ayudar a cientos de personas humildes con las que me identifico, también me permite proveer a mi familia de mejores condiciones de vida. Sin embargo, en este tiempo me he dado cuenta de que el poco avance en algunas colonias se debe a la gran cantidad de trabas burocráticas gubernamentales que existen, pero he aprendido también que el pueblo pobre debe organizarse, educarse y luchar porque se respeten sus derechos sociales. No pedimos nada regalado, lo que hacemos es exigir que las autoridades municipales, estatales y federales, respeten nuestra Carta Magna, cumplan con los compromisos asumidos con la ciudadanía, y pongan en marcha nuestros proyectos más urgentes con el fin de atenuar las condiciones de miseria en que viven miles de familias en nuestro estado”.
Así, la creciente integración del pueblo pobre a las filas del Movimiento Antorchista ha permitido que lugares que nunca habían sido atendidos por las autoridades municipales hoy sean un ejemplo a seguir; con colonias de calles trazadas, alumbradas, limpias, que continúan gestionando pliegos petitorios para obtener solución a la falta de servicios básicos, y para asegurar que el recurso asignado a las obras sociales llegue en la forma, tiempo y cantidad en que fue programado.
"Seguiremos trabajando aún más para que el pueblo se organice y luche por sus demandas, ya que solamente
organizados podremos hacer un cambio sustancial a nuestras condiciones de vida”, dijo Montoya.
Son miles de personas dentro de la entidad que se han convencido del trabajo que el Movimiento Antorchista está realizando no solo en Aguascalientes sino en toda la república, pudiendo comprobar a través de la experiencia propia que contrario a la forma en la que se define al Movimiento Antorchista por parte de las altas esferas de gobierno, principalmente del presidente de la república mexicana, el Movimiento Antorchista no es un Movimiento de revueltas y agresiones; todo lo contrario es un Movimiento reflexivo interesado en el pueblo
pobre, en su bienestar social, económico, educativo y político.
Además, siempre ha permanecido accesible para todos los interesados en integrarse para trabajar de forma solidaria y decidida, siempre respetando las leyes que nos rigen como nación pero también exigiendo los derechos que nos corresponden como pueblo trabajador.
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