Mucho se ha hablado desde las más altas esferas del Gobierno mexicano y del mundo, que se debe proteger la libertad de expresión porque es un derecho universal del que podemos ejercer todos los seres humanos.
Seguido de esto, se dice que podemos tener acceso a la información en beneficio de una sociedad más informada y actualizada sobre lo más sobresaliente a nivel nacional e internacional; por consiguiente, hablar de censura es remontarse a tiempos remotos cuando ésta surge como una práctica común que el poder ejerce sobre los individuos y los pueblos, ya fuera para ocultar información al mundo, a un cierto grupo o por el poder ejercido ante ciertos estratos sociales.
También existen ciertas formas de censura, desde las más silenciosas y sutiles hasta las más salvajes y violentas.
En el artículo publicado por la Universidad de Celaya “Violencia contra periodistas como síntoma de la censura en México”, se abre un panorama tan amplio que deja la puerta abierta para pensar si de verdad hay libertad de expresión en México, dadas las crecientes agresiones contra periodistas y la censura que se padece al buscar la verdad de ciertos temas que afectan obscuros intereses y acontecen en el seno de la sociedad actual.
Quienes llevan la tarea de recopilar la información para después interpretarla y divulgarla, a través de los múltiples medios de comunicación masiva, son los periodistas y los reporteros, mismos que, a su vez, se topan de cara con la censura impuesta por las mismas altas esferas que predican la libertad de expresión.
Según cifras de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), aunque ha habido un aumento considerable al acceso de la información gracias a los avances tecnológicos, la libertad de expresión sigue en un constante y creciente riesgo.
Ante esta situación surgen un sinfín de limitaciones para todos aquellos profesionales de la comunicación que intentan decir la verdad, divulgarla o que tan solo buscan investigar. Esta censura no solo afecta a los periodistas, reporteros o medios de comunicación, sino también a la población porque el pueblo estará desinformado y no podrá crearse una idea objetiva de cómo está el panorama, por ejemplo, de la violencia, el narcotráfico, de los ecocidios o cualquier otro problema social y público que sea acallado.
Como consecuencia de esto, no solo se ha recurrido a las diversas formas de censura, sino que la violencia en contra de periodistas ha crecido a nivel mundial, y México se ha convertido en uno de los lugares más peligrosos y letales para la vida de los periodistas, más inseguro que Siria, país en guerra.
Según la UNESCO, en 2019 creció un 18 por ciento el número de periodistas asesinados a nivel mundial; los estados árabes con el mayor número de asesinatos con 149, Latinoamérica y el Caribe con 127, Asia y pacífico con 120, África con 51, Europa Oriental y América del Norte con 28 y Europa Central con 20.
Lo que pasa en la actualidad con la operación militar de Rusia en Ucrania, ha provocado una impresionante censura de los medios de comunicación de Estados Unidos y Occidente en contra de los medios de comunicación rusos; han dejado desinformada a la población mundial a través de la manipulación de los hechos y engañando a la opinión pública del planeta.
El poder que el imperialismo norteamericano tiene sobre los medios de comunicación deja al descubierto que no hay libertad de expresión en el mundo cuando se anteponen los intereses económicos y políticos de unos cuantos multimillonarios magnates que pretenden imponer su hegemonía en el resto de los países del orbe.
La falsa propaganda de que el gobierno ruso, que encabeza Putin, es la encarnación del mal, y de que el gobierno de Estados Unidos el paladín de la justicia y salvador del mundo es una farsa gigantesca replicada por los medios de comunicación al servicio de los mezquinos intereses del imperio.
El único medio que en nuestro país se ha atrevido a mostrar la verdad objetiva sobre Estados Unidos en Ucrania es la revista Buzos de la Noticia y el líder nacional del Movimiento Antorchista, quien habla sin censura, con base en información comprobable y fidedigna, sobre lo que pasa con Rusia, Ucrania, la OTAN y el papel que juega el país estadounidense en este conflicto militar en el que habrá de definirse el rumbo del nuevo orden mundial.
Hoy más que nunca los pueblos debemos estar informados, debemos estudiar a profundidad y encontrar la navaja dentro del pan, debemos rechazar la manipulación informativa y la censura que existe en los medios de comunicación masiva, debemos repudiar los crímenes que el Estado mexicano tolera en contra de los profesionales de la comunicación.
Debemos rechazar las mentiras del gobierno morenista y, en el ámbito internacional, no debemos dejarnos engañar por las falsedades que, en todo momento, propagan los corifeos al servicio del imperialismo norteamericano. Un pueblo bien informado estará siempre en mejores condiciones de enfrentar la adversidad y defender sus legítimos intereses.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario