Este 12 de abril se cumple un año del artero y brutal crimen cometido en contra de los destacados dirigentes antorchistas en el estado de Guerrero, Conrado Hernández y su esposa Mercedes Martínez, así como de su pequeño hijo Vladimir de sólo seis años de edad, que se encontraba a su lado por el periodo vacacional.
Por su brutalidad, pues los adultos fueron asesinados a golpes y el menor por asfixia según los peritajes, y por la falta de motivos para cometerlo al tratarse de líderes y personas de conducta intachable así como de un inocente, el crimen desató la indignación social y la exigencia de justicia por parte de quienes se enteraron del hecho, no sólo en Guerrero sino en todo el territorio Nacional.
La sociedad debe exigir justicia con más decisión y ahínco, pues no debe, por ningún motivo, normalizarse la impunidad en nuestro país.
Ya ha pasado un año y las autoridades responsables de esclarecer el asesinato así como de llevar ante el juez a los culpables, materiales e intelectuales, para ser condenados por su crimen, no han avanzado ni un ápice en las investigaciones y menos en las acciones concretas para tal fin.
No ha habido todavía justicia para las víctimas y sus deudos; la impunidad para los asesinos sigue campeando por sus fueros. Van a hacer también ya un año las protestas para exigir la intervención del ejecutivo federal, pues llegaron a palacio nacional en mayo del 2023 durante la mañanera y fueron escuchadas por el gobierno a través de la titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
Rosa Icela Rodríguez, al igual que la gobernadora del estado de Guerrero, Evelyn Salgado, al atender a una comisión de antorchistas, condenó los asesinatos e hizo compromiso de hacer lo correspondiente para resolver el caso a través de los órganos de la procuración de justicia, y es fecha y hora en que todo sigue, prácticamente igual.
Es sabido que en Guerrero, como en muchos otros lugares, las cosas están muy mal; que según “Datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad, señaló que del 1 de enero al 31 de diciembre del 2023 se registraron mil 400 homicidios dolosos.
La Vicefiscalía de investigación reveló que en todo el año abrió mil 177 carpetas de investigación por delito de homicidio doloso; no obstante, de ellas sólo doce investigaciones fueron judicializadas con detenido.
En todo 2023, según Infobae (21 de febrero de 2024), la Fiscalía no logró esclarecer ni una sola investigación abierta, registrando cero sentencias condenatorias, lo que habla de una impunidad del 100 % en este delito.
Sin embargo, ante tal situación, que no es ni de lejos privativa de esa entidad federativa, lejos de infundir una actitud conformista o de desaliento en la población, debe servir de acicate para preocuparse, ocuparse y actuar.
La sociedad debe exigir justicia con más decisión y ahínco, pues no debe, por ningún motivo, normalizarse la impunidad en nuestro país porque es fuente de más acciones delictivas.
Tampoco debe resignarse el pueblo a la injusticia, y la ausencia de derechos, porque las autoridades están obligadas por mandato de ley a garantizarlos a todos los ciudadanos.
Por eso mismo, los antorchistas, protestaron este viernes 12 de abril frente a Palacio nacional, y el domingo 15 más de dos mil, marcharon por las calles de Chilpancingo, capital de aquel estado, exigiendo justicia para nuestros compañeros, pero no sólo para ellos sino para todas las familias mexicanas que padecen o han padecido las mismas circunstancias. Para exigir justicia y un alto a la impunidad.
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