Por medio de la presente misiva, me dirijo respetuosamente a la licenciada María Elena Hermelinda Lezama Espinosa, gobernadora de Quintana Roo, con el objetivo de dar a conocer, de viva voz, las necesidades de miles de ciudadanos que representamos como organización social a lo largo y ancho de la entidad.
Es preciso mencionar que, el pasado 10 de octubre, nos presentamos afuera del Palacio de Gobierno de Quintana Roo con una pequeña comisión representativa de antorchistas para entregar nuestro pliego petitorio en el que, de manera resumida, planteamos las demandas más sentidas de nuestros agremiados, que son, en su mayoría, gente de escasos recursos económicos tanto del campo como de la ciudad.
El mismo día de la entrega del pliego petitorio fue recibida una comisión de miembros del Comité Estatal antorchista por funcionarios menores de la Secretaría de Gobierno (Segob), quienes solo se limitaron a escuchar la lectura del pliego petitorio para posteriormente agendarnos una cita con la licenciada María Cristina Torres Gómez, titular de la Segob.
El 14 de octubre, es decir, cuatro días después de la entrega del documento que contiene nuestras demandas, nos recibió la Licenciada Torres Gómez, en compañía de los secretarios de Economía (SEDE), de Desarrollo Agropecuario Rural y Pesca (SEDARPE), de Educación de Quintana Roo (SEQ), así como los representantes de las secretarías estatales de Obras Públicas (SEOP), de Desarrollo Social (SEDESO), de Desarrollo Territorial y Urbano Sustentable (SEDETUS), Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA) y del Instituto de la Cultura y las Artes (ICA). Es decir, con una buena parte del gabinete principal de su gobierno.
Para nosotros, fue grato ser recibidos no solo por la titular de la Segob, como comúnmente se hace, sino por una buena parte del gabinete del actual gobierno estatal que usted preside. Coincidimos en la idea de que se sienten las bases para que su administración, de manera coordinada con los ciudadanos y organizaciones, contrarreste el rezago social histórico que enfrenta Quintana Roo.
De igual forma, vemos correcto que su gobierno tenga como uno de los objetivos principales mejorar las condiciones de vida de los quintanarroenses, sobre todo, de los que menos tienen que son la inmensa mayoría.
Sin embargo, uno de los motivos principales de esta misiva es manifestarle que los compromisos que hicieron los altos funcionarios, el pasado 14 de octubre, es decir, hace más de un mes, no se han cumplido, por lo menos, los que ya debieron cumplirse, mucho menos se ha dado seguimiento a los acuerdos de solución de las demandas que requieren de más tiempo y recursos. Nos preocupa que no se cumpla con el principio de “ñsentar las bases para que el gobierno y ciudadanos contrarresten el rezago social que agobia a nuestro estado.
Las demandas que hemos planteado son elementales. Como ejemplo está el mejoramiento a la vivienda, pavimentaciones en colonias y comunidades humildes, regularización de colonias, apoyos para el campo, apoyo a estudiantes, construcción de aulas escolares, alumbrado público, entre otras. Por lo que solicito a usted de manera atenta, se avance en los compromisos hechos y así poder dejar asentado que, en efecto, hay voluntad de la administración actual de combatir el rezago social.
Si bien es cierto que el reto de su gobierno es muy grande porque el rezago social es enorme, también es cierto que, si hay compromisos y ganas de hacer las cosas, se puede avanzar con paso firme. Estamos claros que la directriz a sus funcionarios es de no perder ni un solo minuto de trabajo durante los cinco años de su mandato si se quiere llegar al objetivo planteado, pero insisto, por lo menos con nuestras demandas, no hay avance.
Sabemos que usted tiene claro el tamaño del reto, que nuestro Estado, a pesar de contar con grandes riquezas naturales y lugares paradisíacos, también tiene un enorme rezago social, puesto que la pobreza ha venido creciendo, por ejemplo, tan solo el exgobernador Carlos Joaquín González entregó un Estado, según el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi) con 892 mil 800 ciudadanos en situación de pobreza; lo que representa el 47.5 por ciento de un millón 858 mil quintanarroenses que hay ahora; esto refleja un incremento de 11 puntos porcentuales de 2016 a 2022. Tan grave está la cosa que el Inegi reveló que, del total de la población, el 29.4 por ciento no tiene acceso a la alimentación nutritiva y de calidad, lo que representa a 553 mil quintanarroenses. Hay municipios con alto grado de extrema pobreza como Felipe Carrillo Puerto con 31.7 por ciento de su población y José María Morelos con el 25 por ciento.
Un dato alarmante es que, de 543 mil 728 jóvenes menores de edad en el Estado, es decir, el 29.3 por ciento del total de la población, 312 mil 893 viven en pobreza; un porcentaje del 52 por ciento de acuerdo con el informe “El derecho a la salud y supervivencia de la niñez y la adolescencia en México” de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim). Nuestros jóvenes, que son el futuro de nuestra entidad están en peligro y hay que crear políticas públicas para frenar este grave problema.
Son muchos los problemas, pero la pobreza es la madre de todos ellos. En el Estado, el desarrollo económico es desigual, porque, mientras el norte, donde el turismo es pujante y crece a pasos agigantados, el sur se queda estancado y la zona maya sigue olvidada. Por si esto fuera poco, la violencia del crimen organizado y el no organizado ha crecido no solo en las colonias marginadas de las grandes urbes y lugares turísticos importantes como Cancún, Playa del Carmen y Tulum, sino que ahora ha llegado a las playas, restaurantes y hoteles de lujo y las familias no se sienten seguras ni en su propia casa.
Entendemos la situación, por eso nosotros como organización político-social siempre hemos luchado para organizar a la gente humilde para que exija sus derechos elementales. Pero cuando hay un gobierno que escucha y atiende las necesidades del pueblo, nosotros lo que hacemos es coadyuvar para que los avances sean más rápidos. Esperamos que nuestras demandas no se queden en el olvido y que su gobierno, verdaderamente sea cercano a la gente.
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