Antier se cumplieron 110 a±os de la Revoluci¾n Mexicana; es decir, poco mßs de un siglo de que los mexicanos decidieron romper, con las armas en la mano, con el viejo rÚgimen de gobierno impulsado por lo que en ese momento se llam¾ "el porfiriarto".El lema de campa±a polÝtico-militar, con el que se logr¾ sumar a la batalla a los mßs pobres de la sociedad, fue: "Sufragio efectivo, no reelecci¾n", y los mexicanos de entonces creyeron que con eso bastaba para obtener el cambio social y econ¾mico que anhelaban.Pero tan luego Madero se hizo con el poder, se vio claro lo que en realidad signific¾ el lema.Cierto es que se desterr¾ y conjur¾ la reelecci¾n por dÚcadas, pero la pobreza no.Y hoy estamos peor.Hasta antes del gobierno actual, por lo menos a·n se reconocÝa la deuda que con los campesinos y los pobres de la ciudad, tenÝan y tienen , los gobiernos emanados del movimiento armado, pero hoy, parece que ya nada de eso importa.Se quitaron la mßscara.Hoy, el moderno lema de Morena es la lucha contra la corrupci¾n, pero como antes, ya se ve claro que los pobres de siempre seguirßn igual.Sigue pendiente pues un verdadero cambio, uno mßs justo y equitativo, uno en el que los pobres y desamparados de siempre, dejen de ser s¾lo un lema mßs de campa±a electoral.
Pero hoy no abundarÚ en el movimiento armado de 1910, ya habrß otros aniversarios en los que seguramente habrß mucho quÚ decir.Hoy, quiero llamar la atenci¾n sobre la urgente necesidad, que, como antes de 1910, a·n sufre la mayorÝa del pueblo de MÚxico por un verdadero cambio democrßtico, econ¾mico y social.Hay quienes afirman, sin sustento vßlido alguno, que este cambio lleg¾ con la 4ªT al gobierno mexicano, pero se equivocan, la realidad demuestra que, como en el gobierno de don Francisco I.Madero, para los pobres, que siempre ponen las vÝctimas y los muertos, todo sigue igual, sobre todo su pobreza.
Las revoluciones sociales que se hacen sin la lucha del pueblo, no son revoluciones verdaderas, y para Morena, el pueblo ya es lo de menos.Dicen que el pueblo ya habl¾ fuerte en el pasado proceso electoral, pero yo lo dudo.Afortunadamente para MÚxico, el pueblo no ha dicho a·n su ·ltima palabra.
En junio del a±o que entra, se renovarßn 21 mil 368 cargos y 15 gubernaturas, en lo que serß la contienda electoral mßs grande de la historia de MÚxico.Se destaca de aquÝ, la elecci¾n de 500 diputados federales, mil 063 diputados de 30 congresos estatales y mil 926 ayuntamientos y juntas municipales, de gran parte del territorio nacional; y, como siempre, conforme a los calendarios electorales, ya las tradicionales fuerzas polÝticas de todo el paÝs, estßn haciendo sus amasiatos polÝticos, sus arreglos y estrategias partidistas, para hacerse a como de lugar, con la mayorÝa de los puestos en disputa.Por cierto que, el absurdo ya es prßctica com·n entre todos, prßcticamente entre todos los partidos que, como las serpientes, cambian de piel a cada temporada de elecci¾n.Pero no hay de otra, despuÚs de la Revoluci¾n Mexicana, la partidocracia es la ·nica y verdadera prßctica que decide el reparto del poder.
Pero el pueblo siempre serß el pueblo, y hoy como antes, es su voluntad la que se disputarßn de nuevo, aunque con nuevos y refinados mÚtodos, todos los que quieran gozar de las mieles del poder.La estrategia de Morena ya es muy notoria, es una prßctica vieja y muy manoseada por los que gobernaron el paÝs por dÚcadas: comprar la conciencia y la voluntad popular con dßdivas y limosnas oficiales.Pero los Programas de Transferencia Monetaria, es decir, becas, apoyos, ayudas y etcÚtera, para los mßs menesterosos, no son nada nuevo en MÚxico, datan por lo menos del "salinismo" a la fecha, s¾lo que ahora tienen un evidente plus "lopezobradorista": la abierta persecuci¾n polÝtica, judicial y fiscal contra todos los que considera sus opositores.No hay duda de que, entre algunos opositores al moderno rÚgimen, hay colas tan largas que gusta de adornar mucho el se±or de las ma±aneras; pero su absurda tabula raza, es una vieja y herrumbrada guillotina, que, como la Robespierre, termina siendo una abominaci¾n social, mßs que un buen instrumento de justicia.
Por su parte, la oposici¾n tambiÚn hace lo suyo; y aquÝ tambiÚn (no olvidar el ADN piista de L¾pez Obrador) adornarßn todo cuanto puedan, la extensa extremidad polÝtica del tabasque±o, extremidad en la que no se apoyarßn, seguramente, todos los aspirantes, morenistas y seguidores, al Congreso de la Uni¾n y las gubernaturas en disputa.Pero aquÝ tambiÚn habrß un plus: exhibirßn, sin mucho esfuerzo por cierto, el pÚsimo papel que estßn haciendo los gobierno y legisladores emanados y promovido por Morena.
Y ahora como antes, durante y despuÚs de la Revoluci¾n, veremos golpearse con todo a los dos grandes bandos de la moderna polÝtica actual: los actuales due±os del poder de la naci¾n, contra los antiguos due±os del mismo; y para ello, igual que antes, usarßn y abusarßn a su antojo a los mexicanos mßs pobres, que serßn la carne del ca±¾n electoral.
En Colima, los que se creen analistas polÝticos o algo parecido, ya estßn barajando a diario los nombres de los personajes y sus partidos, con la intensi¾n de poner en el animo de los electores a las preferencias que traen de encargo.Ya no hay dÝa en el que no escuchemos leamos o veamos nombres y rostros, aciertos y desaciertos, virtudes y crÝticas de los se±alados por doquier.Ya en las colonias y pueblos, asÝ sean los mßs alejados y marginados, se ven donde quiera sonrientes, bonach¾nes y dadivosos, a personajes, polÝticos o "ciudadanos" hasta entonces desconocidos por ahÝ, que hacen prßcticamente de todo para agradar, asÝ sea lo mßs ridÝculo, el ßnimo de los posibles futuro electores.
Pero, ¿d¾nde estaban estos desinteresados "ciudadanos" dadivosos, mientras se sufrÝa el encierro de la pandemia?, ¿por quÚ no fueron a los pueblos, colonias, clÝnicas y hospitales, a salvar la vida de los colimenses que morÝan de coronavirus?, ¿por quÚ no hicieron nada para salvar el empleo y el ingreso de los colimenses mßs pobres? Pero lo mßs importante, ¿quÚ garantÝas dan para creer que remediarßn, la terrible situaci¾n econ¾mica, sanitaria, educativa y de seguridad que se padece por todo lados? Nada, yo aseguro que no garantizarßn nada.Pero el paÝs y el estado deben mejorar.Por tanto, debemos escuchar atentos lo que ahora nos dirßn, y lo mßs importante, no olvidar nunca las lecciones de la Revoluci¾n, porque urge, ahora mßs que nunca, un verdadero cambio para los pobres de siempre.¡Todos atentos!
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