La escasez de agua en varias entidades del sur del Estado de México, no solo afecta afecta el consumo cotidiano, sino también la economía familiar porque ha provocado el aumento de los productos de la canasta básica.
En los municipios de: Tejupilco, Temascaltepec, Santo Tomás, Sultepec, Texcaltitlán y Almoloya de Alquisiras, por citar algunos de los 23 que están en la parte sur y sureste de la entidad, se ha elevado el precio del pollo. Antes, el kilo de retazo costaba entre 30 y 40 pesos, ahora la gente lo tiene que pagar hasta en 70 pesos; el kilo de pechuga que antes costaba entre 100 y 110 pesos, ahora para adquirila deben pagar hasta 160 pesos por kilo.
Y así, podemos seguir enumerando los productos básicos que subieron de precio: tortillas 28 pesos el kilo; huevo a 70 pesos, una coliflor –que no es de la canasta básica– cuesta entre 40 y 50 pesos la pieza, el kilo de zanahoria 25 pesos, el frijol lo adquieren entre 60 y 70 pesos, dependiendo del tipo que sea, el litro de aceite barato se cotiza en 60 pesos, y así, todo sube, y más que subirá por la pérdida de las cosechas de maíz debido a la falta de agua.
El dirigente campesino del Movimiento Antorchista de la zona, Saúl Alva, informó que una familia de dos o tres integrantes necesita 200 pesos al día para comer, de los cuales difícilmente dispone porque en promedio su salario es de 150 pesos al día, además de que le falta dinero para vestir, calzar, medicinas, pagar luz.
Según la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) una despensa en las tiendas departamentales de la capital mexiquense cuesta entre 880.70 pesos (Chedraui) y 1,000.60 pesos en Walmart Toluca; pero dicha despensa no pueden adquirirla los campesinos de Tejupilco porque viven a una distancia de dos horas, por lo que tendrían que pagar pasaje de Tejupilco a Toluca, que les cuesta 240 pesos el viaje redondo a la terminal; y si se come unos tacos y bebe un refresco, el costo del viaje se incrementa otros 70 pesos.
Las familias campesinas del Estado de México no cuentan con la alimentación balanceada que debe tener el ser humano para desarrollarse sanamente: los raquíticos ingresos que perciben, no les permiten tener acceso a la carne, ingrediente básico para el desarrollo del cerebro porque le aporta proteínas. De ahí que niños y jóvenes de la zona rural no tengan buen aprovechamiento en la escuela –los que tienen acceso a ella– porque no tienen una buena alimentación.
“No es cierto que para el gobierno de Morena lo importante sean ‘primero los pobres’, vemos con tristeza que no es así, pues los pobres nos hacemos cada vez más pobres, cada vez vemos como aumentan los precios de las cosas y de nada sirve que se aumente el salario mínimo si aumentan los precios y no podemos adquirirlos”.
El líder antorchista consideró que para que haya un verdadero cambio en la economía de los campesinos, y de todos los mexicanos, debe haber un cambio en el sistema económico para que no sólo beneficie a los más ricos, sino a todos los habitantes de este país.
“Ahora estamos viendo que el gobierno de López Obrador, en lugar de preocuparse por tener acciones que ayuden al pueblo, prefieren gastar millones de pesos en las campañas electorales de las corcholatas, diciendo que los de Morena son los buenos, cuando no es cierto, pues nos están haciendo más pobres cada día, y los que antes estaban más o menos bien, ahora ya están como nosotros, pobres… o que me digan ¿a cuántos mexicanos ha sacado Morena de la pobreza? A ninguno”, comentó.
“Muchos campesinos sabemos que trabajando y luchando solos nunca vamos a salir de la pobreza, por eso estamos organizados en Antorcha para entre todos hacernos fuertes y juntos trabajar para quitar del poder a los políticos demagogos y poner un verdadero gobierno del pueblo. La tarea es difícil, pero tenemos que hacerla”, concluyó.
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