Desde el gobierno de Carlos Bustamante Anchondo, pasando por Jorge Astiazaran, Juan Manuel Gastelun y Arturo González han tenido dentro de su programa de gobierno y como prioridad, resolver el problema del alumbrado público del municipio de Tijuana, invirtiendo sumas millonarias, pero el resultado es el mismo, miles de lámparas sin funcionar. De acuerdo a la Dirección de Servicios Públicos Municipales en el último bimestre de la administración morenista saliente, encabezada por KARLA Magfarlan había 82 mil lámparas, de las cuales, entre 15 y 18 mil estaban apagadas, es decir no funcionaban.
Como es sabido, existe una relación muy cercana entre el alumbrado público y la seguridad. Al haber calles y baldíos oscuros, sin iluminación, la ciudadanía es vulnerable ante los amantes de lo ajeno. De acuerdo a la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) emitida por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) realizada en el 2021, el 71.9 por ciento de los encuestados en Tijuana manifestó que uno de los problemas más importantes en la ciudad es que el alumbrado es insuficiente, seguido de Mexicali con el 53.6 %. No sólo la ciudadanía sostiene que el alumbrado público es necesario. Esto lo podemos ver también en la publicación hecha por la ONU en el 2019 en el documento Hábitat “Reducción del crimen a través de la planificación y gestión urbana”, en dicho documento el organismo internacional sostiene “La planificación urbana, combinada con otras acciones sociales y de seguridad pueden reducir la delincuencia en las ciudades y mejorar la calidad de vida de sus habitantes”
De tal manera que cuando las familias humildes que viven en las colonias populares y marginadas, asentadas en la periferia de la ciudad, exigen obras y servicios, alumbrado público, recolección de la basura y pavimentación, están más que justificadas, es una necesidad prioritaria su atención y solución.
Con el gobierno municipal morenista que encabeza Monserrat Caballero Ramírez, no es la excepción, su gobierno denominado “Transforma Tijuana, manos a la Obra” ha propuesto trabajar en cuatro ejes, las cuales son Infraestructura, recolección de la basura, reparación e instalación de luminarias y atención a áreas verdes. Al inicio de su gobierno, anunció con bombo y platillo, que reparará e instalará 10 mil luminarias con una inversión de 48 millones de pesos. De estas diez mil luminarias, entre reparadas y adquiridas, 2500 serán de tecnología LED que tendrán un costo de 2.5 millones de pesos que serán con recursos propios, provenientes de la DSPM, seguramente del impuesto que el XXII Ayuntamiento de Tijuana autorizó y que desde entonces hemos estado pagando, sin que se haya invertido, pues en las colonias populares siguen sus calles en la oscuridad.
Por lo pronto esperaremos los compromisos establecidos en la última reunión con el gabinete de la alcaldesa Monserrat Caballero, veremos qué tan consecuente es con su programa de gobierno, pues en nuestras peticiones hay la necesidad de obras de infraestructura como pavimentación, agua potable, drenaje sanitario y pluvial, electrificación, recolección de la basura y el alumbrado público, todos están dentro de los cuatro ejes del gobierno morenista. Pero también tenemos claro y el tiempo nos lo ha enseñado que para poder tener progreso y mejorar la calidad de vida del pueblo trabajador es necesario la lucha organizada, nada más, pero nada menos.
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