Como la mayoría de los sonorenses sabemos, nuestro estado a lo largo y ancho de su territorio vive una situación crítica, una realidad que lacera, que lastima a un gran sector de la población socialmente vulnerable, ubicada principalmente en colonias populares, unidades habitacionales, ejidos y poblados.Asentamientos donde nuestro Movimiento tiene vecinos organizados que permanentemente tocan puertas en las instancias gubernamentales con el único propósito de encontrar solución a sus necesidades básicas de obras y servicios.Tarea difícil pero necesaria que hemos emprendido como Movimiento desde hace 44 años a lo largo y ancho del país, tarea obligada que surge de una causa social muy profunda, tan profunda como la aguda pobreza en la que se encuentran más de 102.5 millones de mexicanos que perciben un mísero salario que nos les alcanza para adquirir la canasta básica todos los días, estos mismos mexicanos viven en zonas sin servicios básicos.Estos motivos hicieron que el Movimiento Antorchista Sonorense en los meses pasados haya emprendido una gestoría permanente en las instancias gubernamentales estatales, solicitando se les entregue a los humildes algo de lo que por derecho les corresponde.
Por eso, después de varios meses de lucha; mítines, marchas y plantones, acompañados de intensas difusiones durante el año 2017, se logró firmar una minuta de acuerdos en el mes de agosto, entre autoridades estatales y representantes de nuestra organización.Dicha minuta contemplaba la elaboración de proyectos y ejecución de obras para varias comunidades; la dotación de apoyos a la vivienda y de paquetes alimenticios; la construcción de la Casa del Estudiante Sonorense espacio donde se pueden hospedar y alimentar jóvenes de las zonas rurales que deciden venir a estudiar a la capital-; la regularización de vivienda popular y de Infonavit; la electrificación de comunidades que, estando en pleno siglo XXI viven en penumbras, entre ellas El Sahuímaro, las colonias Humberto Gutiérrez, Cajeme y Manuel Serrano; la reubicación y construcción de escuelas preescolar, primaria y secundaria en Puerto libertad, debido al alto riesgo que corren los estudiantes y profesores, porque los ductos de gas de la termoeléctrica pasan a escasos metros de las instituciones educativas; los maestros organizados en Antorcha demandan el pago de salarios y la recategorización de plazas docentes de primaria, secundaria y telebachillerato; pago del subsidio económico mensual para la casa del estudiante sonorense; entrega de paquetes básicos de apoyo a la vivienda para familias de escasos recursos; terminación de la carretera al Choyudo, obra etiquetada con recurso federal gestionado por los diputados antorchistas; urge la construcción de infraestructura educativa (aulas, módulos sanitarios) debido a las pésimas condiciones en que estudian nuestros jóvenes; elaboración del proyecto y programación de recursos para construcción del puente vehicular en la colonia La Antorcha, debido a que cuando llueve los habitantes quedan incomunicados por el cauce del río; cumplimiento de entrega de paquetes alimenticios a familias de escasos recursos; asignación de becas escolares de nivel básico para estudiantes en zonas rurales; solicitamos la intervención del gobierno estatal para que los ediles de Empalme y Huatabampo resuelvan las demandas de los antorchistas en esos municipios; pedimos la revisión y programación de presupuesto para obra social del año 2018.Todo lo antes mencionado se halla estipulado en un documento lleva meses sin resolverse.
Dicha minuta se revisaba periódicamente por ambas partes, en reuniones que se realizaban en las oficinas del Palacio del Gobierno estatal, pero con el transcurrir de los meses y después de decenas de reuniones infructuosas y con nulo avance en soluciones hasta el día de hoy, el Movimiento Antorchista Sonorense ha decidido levantar la cabeza y emprender una serie de denuncias y movilizaciones en todo el estado (vallas humanas, perifoneo, marchas, mítines, difusiones en cruceros, difusiones en lugares fronterizos y casetas de autopistas, ruedas de prensa, etc.,) hasta hacerse escuchar y obtener respuesta pronta y favorable por parte de las autoridades competentes, mismas que en su momento firmaron la minuta de compromisos.Por estas razones de peso social, hacemos un llamado respetuoso a la gobernadora de nuestro estado, la Lic.Claudia Pavlovich Arellano, para que intervenga, atienda y resuelva los compromisos plasmados en la minuta 2017, así también se revisen y se programen recursos para obras sociales del año 2018.
Varias opiniones coinciden en que urge escuchar a la ciudadanía sonorense, organizada en un movimiento social o no, en que urge registrar sus inquietudes y dar alternativas favorables, porque la población en general sufre un hartazgo, está cansada de promesas incumplidas, es un sentir general en zonas urbanas y rurales.Por eso, los antorchistas a tiempo estamos dando el grito de alerta, porque quizás para mañana sea demasiado tarde.
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