En la destitución de Irma Eréndira Sandoval Ballesteros de la Secretaría de la Función Pública hay una gama de matices respecto a las causas: la percepción de deslealtad política y su fracaso en la tarea de combatir la corrupción. Lo cierto es que ya está en la congeladora y el presidente Andrés Manuel López Obrador, a través de un video publicado en redes sociales informó esta determinación, en un escenario totalmente diferente al de ocasiones anteriores.
Un escritorio marcó la distancia; frente al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador estuvieron Irma Eréndira Sandoval y Roberto Salcedo Aquino, su sustituto. Las palabras del presidente confirmaron la lejanía con la exsecretaria y por su tono, se trataba de un castigo, “he tomado la decisión de llevar a cabo un cambio al iniciar una nueva etapa del gobierno y vamos a llevar a cabo otras reformas, vamos a llevar a cabo una reforma administrativa y vamos a profundizar más en el combate a la corrupción y en hacer un gobierno austero”.
Ya se había filtrado, desde hace algunos meses, la salida del gabinete presidencial de Irma Eréndira Ballesteros, tema en el que destacan tres lecturas: Primera, las omisiones en su declaración patrimonial, tras ser señalada de adquirir en nueve años, un patrimonio valuado en más de 60 millones de pesos, cuando tenía un salario de investigadora en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). También se le documentó la copropiedad de cinco casas con su esposo John Ackerman y otra más que le obsequió Marcelo Ebrard cuando fue jefe de gobierno en la Ciudad de México. Desde la publicación de la omisión de su patrimonio, dejó de ser convocada a las conferencias de prensa mañaneras, aunque su trabajo en la 4T acreditaba su permanencia en la Secretaría, al parecer fracasó en su función de combatir la corrupción, principal compromiso del gobierno federal, que refrenda cada día desde sus conferencias mañaneras.
Y eso precisamente es lo que el presidente pidió al nuevo titular de la Secretaría de la Función Pública, Roberto Salcedo, “desterrar la corrupción de nuestro país y seguir haciendo un gobierno austero, un gobierno probo, un gobierno que entienda que el poder es humildad, no es prepotencia, lujos, fantocherías, extravagancias, que debe uno ser, no funcionario público, sino servidor público”.
Segunda: Irma Eréndira se había obstinado en atacar la precandidatura de Félix Salgado Macedonio, pues su hermano, Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros, aspiraba también la candidatura de Morena a la gubernatura de Guerrero, convirtiéndose en operadora política y desatendiendo su función de secretaria del gabinete. Junto con su esposo, John Ackerman, consejero del presidente López Obrador, la pareja fue identificada como operadora política del proceso electoral en Guerrero. Al final, ni Félix Salgado ni el hermano de Irma Eréndira lograron la candidatura, que ganó Evelyn Cecia Salgado, hoy gobernadora electa.
Tercera: La derrota del grupo de los radicales, al que ha pertenecido la hoy exsecretaria desde la fundación de Morena, que perdió la mitad de la Ciudad de México y ocasionó que la oposición recuperara varios espacios.
La facultad que tiene el presidente de quitar y poner a sus colaboradores deja claro que seguirán formando parte del gabinete de la 4T, los que sean incondicionales, los que hablen sólo cuando les dé la palabra, refrendando una vez más que el único que hace política y tiene la razón es él; la expulsión de Irma Eréndira que muestra el rencor político del presidente de la República, es un claro recordatorio a los demás integrantes del gabinete de la 4T, de que el poder que tienen lo pueden ejercer siempre y cuando sea a favor del proyecto lopezobradorista. Aunque el presidente asegura que no aplica rencor o venganza contra sus adversarios, los hechos lo contradicen y su decisión de relevar a Eréndira Sandoval de la Secretaría de la Función Pública evidencia su malestar por los obstáculos que pusieron su alfil, Félix Salgado Macedonio.
El gobierno sigue siendo mediocre, populista, clientelar y a modo del presidente, que lleva ya tres años en el poder y cometiendo errores que han costado muchas vidas, por ejemplo, con el mal manejo de la pandemia de covid-19, con el creciente aumento de la inseguridad, temas torales (salud y seguridad) que deben ser atendidos desde la cúpula federal. Hacer un análisis serio y real de la situación actual, es el llamado a los mexicanos para poder cambiar el rumbo del país en el 2024.
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