* Asegurar la alimentación de las familias, la atención médica y la prevención sanitaria
* En el "regreso a la nueva normalidad" es más importante la vida de los mexicanos
La situación de emergencia nacional ya lleva más de dos meses y no se ve cuánto pueda prolongarse.Esa indefinición debe llevar a las instituciones a replantearse las medidas de la contingencia tomando como objetivo principal preservar la vida de los mexicanos, de manera que todas las decisiones y el uso de los recursos públicos tengan ese objetivo fundamental, sobre todo ahora que ya se está instrumentando el llamado "regreso a la nueva normalidad", que puede poner en riesgo a todos los mexicanos y resultar contraproducente "debe pensarse bien qué se va a hacer y con qué propósitos, de lo contrario, la contingencia se prolongará y con ella el sufrimiento de la gente, provocando la descomposición del tejido social y la desestabilización de la relativa paz, que hasta el momento han observado los ciudadanos".
Esto aseguró el dirigente estatal del Movimiento Antorchista de Campeche, Fernando Artero Mendoza, quien se refirió a la prolongación de la cuarentena, el impacto que tiene esta "pausa social" en la vida productiva y social del país, en la seguridad y en el bienestar de la mayoría de los mexicanos.
El líder social explicó que, a más de dos meses de que la Pandemia de covid-19 provocara la detención del aparato productivo, el encierro de las familias en sus hogares, como medida para frenar los contagios del letal virus, afectando la vida económica de todos los mexicanos, desde las grandes empresas hasta los pequeños changarros familiares, pero sobre todo a los obreros y empleados al detenerse su fuente de trabajo, y más aún los que no tienen empleo fijo, sino que viven en la llamada informalidad y no cuentan con ningún tipo de ingreso actualmente ni modo alguno para siquiera sobrevivir con sus familias esta situación tan prolongada.
"Es inevitable el golpe a la economía nacional, pero eso debe leerse como golpe a la economía de las familias, sobre todo de quienes solamente tienen su fuerza de trabajo para venderla y poder así comprar alimentos, que son a su vez los que con esa fuerza de trabajo en acción mueven a todo el país y sostienen la economía nacional; hoy no pueden hacerlo y no hay modo de que puedan sobrevivir y darle de comer a sus familias".
A esto, que es lo básico, se añade una serie de problemas que el líder social propone que deben priorizarse en el gasto de los recursos públicos, para atender lo más urgente."Lo primero es el alimento, que ya dije, y eso se soluciona distribuyendo alimentos", por ello justificó su petición de un Programa Nacional de Distribución de Alimentos, petición que hicieran desde los primeros días de la contingencia, pero que hasta el momento ha sido desoída por parte del Gobierno federal.
"Algo han hecho el gobierno del Estado y algunos Presidentes municipales, pero es muy poco el impacto, dado el tamaño del problema", además de que en algunos casos los apoyos se han distribuido de manera focalizada y, según se han quejado en algunos lugares, hasta de manera clientelar.Los recursos los tiene el gobierno federal, y tiene la estructurara para orquestar un programa nacional, además de que es su obligación, por ser su mandato institucional, velar por la seguridad alimentaria del pueblo mexicano.
Después de eso, aseguró Artero Mendoza, se debe asegurar la atención médica, es decir, "se deben tener las instalaciones, implementos, medicinas, personal y la infraestructura hospitalaria suficiente para atender y salvar la vida de todos los mexicanos, incluidos los mismos doctores y enfermeras" según el líder Antorchista, los pocos recursos con los que cuenta el gobierno se deben reorientar, a atender lo mejor que se pueda este frente de lucha contra la pandemia, el principal, pues es ahí donde se gana o se pierde la guerra y es donde hay serias deficiencias que sí se pudieran atender si se reorientan los recursos de la nación.No vamos a discutir la viabilidad de las mega obras emblemáticas de la administración del Presidente López Obrador ni las compras de estadios de béisbol o cualquier otro gasto en materias de deporte, arte, etc."Pero si vamos a decir que, en estos momentos, es más, muchísimo más urgente atender el sector salud, que es donde se está dando la guerra contra la pandemia y es donde se salvan o se pierden vidas; la vida es lo más importante y debemos preferir gastar en salvar vidas".
Artero Mendoza dijo que la siguiente prioridad es pensar bien la viabilidad y los mecanismos para el famoso "regreso a la nueva normalidad".Ante los anuncios reiterados del Gobierno Federal de reiniciar actividades productivas en los sectores de automotriz, minería y construcción a partir del mes de junio, "no parece oportuno el regreso a la nueva normalidad en medio de la fase más crítica de contagios y muertes por el virus, no podemos poner en juego la vida del trabajador", y puso de ejemplo lo que sucede en los estados del norte en las empresas maquiladoras extranjeras que han seguido trabajando y han provocando la muerte por covid-19 de cientos de trabajadores; o lo que sucede en las instalaciones de PEMEX en la sonda de Campeche, que es peligroso e irresponsable foco de infección para todo el estado y el país, en donde ya han muerto muchos de nuestros obreros petroleros, debido al nulo o pésimo manejo de las medidas de prevención por parte del Director de Petróleos Mexicanos Octavio Ramírez Oropeza, colocado en ese importante puesto por capricho del Presidente.
"No se debe permitir.Primero, si no se puede aún reactivar a las empresas, que no se abran, se debe prolongar la pausa productiva, y para ello son las dos medidas anteriores, a las que se debe agregar una actitud más valiente y más honesta del Gobierno federal para no dejarse presionar por las empresas poderosas ni nacionales ni extranjeras, ni dejarse llevar por intereses de otro tipo, pues es más importante la vida de los mexicanos".
Y en los lugares en los que sí se pueda reactivar las actividades, se deben proponer y exigir medidas estrictas de prevención: espacios en lugares de trabajo, limpieza y sanitización, horarios y roles de trabajo, así como instrumentos y protocolos para monitorear posibles portadores y su tratamiento."Los empresarios tienden a disminuir costos, no quieren gastar en mejorar las condiciones de trabajo.Pues en estas circunstancias se les debe exigir que lo hagan, aunque aumenten costos y aún a costa de sus utilidades, si quieren seguir funcionando como empresas productivas", y eso lo puede exigir e implementar el Gobierno federal, "si realmente quiere salvaguardar la vida de los mexicanos".
Finalmente, Artero Mendoza reiteró un llamado a todos los mexicanos para que asuman estas exigencias, para que no se dejen intimidar por la crisis sanitaria, pues "México tiene todos los recursos, la fuerza y el valor para superar esta crisis y otras peores, pero con la condición de que el pueblo mexicano se levante, y exija lo que le corresponde.Si todos los mexicanos nos unimos y organizamos para exigir nuestros derechos, podremos superar esta crisis y salir fortalecidos para que, quedemos donde quedemos, podamos relanzar al país hacia el crecimiento y el progreso social con justicia para todos".
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