El pasado 15 de noviembre, la población mundial alcanzó los ocho mil millones de habitantes, de acuerdo con el informe Perspectivas de la Población Mundial, que también prevé que India superará a China como el país más poblado del mundo en 2023. El bebé ocho mil millones nació en República Dominicana.
Las últimas proyecciones de Naciones Unidas, publicadas con motivo del Día Mundial de la Población, sugieren que el número de habitantes del planeta podría llegar a alrededor de 8 mil 500 millones en 2030 y a 9 mil 700 millones en 2050. Sin embargo, la población mundial está creciendo a su ritmo más lento desde 1950, por debajo del uno por ciento en 2020. Más de la mitad del aumento de la población mundial previsto hasta 2050 se concentrará en ocho países: Egipto, Etiopía, India, Filipinas, Nigeria, Pakistán, República Democrática del Congo y Tanzania.
El crecimiento de la población complicaría la erradicación de la pobreza y se vería, cada vez más, hambre, desnutrición y serios problemas para atender los problemas de salud y dar educación a la juventud y a la niñez. Las consecuencias de este crecimiento, advierten analistas, pueden ser devastadoras si no se satisfacen las necesidades básicas de todos los que estamos y vendrán.
Ya somos ocho mil millones de personas en el mundo, pero la mitad más pobre se tiene que repartir el 2 por ciento de la riqueza mundial, mientras que el 0.001 por ciento de los más ricos se apropia del 6.4 por ciento y tienen 3.2 más riqueza que el 50 por ciento más pobre. Para nadie es desconocido, mucha gente vive en la pobreza, no tiene trabajo ni seguridad alimentaria, lo que provoca que muchos de ellos se conviertan en migrantes para tratar de sobrevivir y buscar una vida mejor para sus familias.
Y de los dos modelos económicos predominantes podemos señalar algunos datos. Estados Unidos (EE. UU.), el país más rico del mundo, tiene los peores índices de pobreza entre las naciones desarrolladas, son aproximadamente 40 millones de estadounidenses que viven debajo de la línea oficial de pobreza. Este país carece de una red firme de protección social, los programas de bienestar social, como los cupones de alimentos y el seguro de desempleo son considerados como limitados. Y a esto se debe agregar las diferencias raciales: las minorías sufren el problema de una forma desproporcionada.
Los expertos señalan al deterioro del mercado laboral para los trabajadores de menos salario, que son cerca del 40 por ciento del total, y que han sufrido pérdidas en sus ingresos reales en las últimas décadas. Así la desigualdad de ingresos y riqueza aumentó y es mayor que en cualquier otro país. Ni por ser un país poderoso y tecnológicamente innovador se aprovecha para erradicar la pobreza. En el sistema capitalista de producción una de sus características es la explotación de la fuerza de trabajo, toda vez que los instrumentos de trabajo son propiedad privada, mientras que el trabajador sólo cuenta con su fuerza de trabajo, lo que provoca que la riqueza se concentre en unas cuantas manos. Mientras unos cuantos se enriquecen día a día, la inmensa mayoría apenas si tiene para comer.
Por otro lado, el éxito de China es disminuir la pobreza de su población constituye una hazaña extraordinaria que la comunidad internacional debe mirar como un ejemplo. En los últimos 40 años, China sacó de la pobreza a casi 800 millones de personas, cifra que representa más del 70 por ciento de la reducción global de la pobreza en este período, de acuerdo a los datos del Banco Mundial.
Junto con la reducción de la pobreza, se debe tomar en cuenta también, que el nivel de ingresos de la población ha aumentado sustancialmente, a la par de una mejora significativa en el desarrollo económico y en las condiciones de vida de sus habitantes. El exitoso combate contra la pobreza debe ser una gran lección de cómo el modelo económico socialista correctamente aplicado por el Partido Comunista y sus líderes, son muestra de decisión, determinación y perseverancia de todo el pueblo.
Los chinos tienen una sana obsesión por la educación. Lograr una buena educación para sus hijos es la máxima prioridad de los padres, quienes hacen enormes esfuerzos para acceder a las mejores escuelas y universidades. El estado acompaña esta tarea mediante un notable aumento de la inversión en educación, junto con subsidios para todos los estudiantes, tanto de la ciudad como del campo. China se ha convertido en un faro mundial en materia de innovación, desarrollo tecnológico y cultura emprendedora.
No perdamos de vista que, la guerra en Ucrania, promovida por el imperialismo norteamericano y sus lacayos, que tienen una larga historia de violación de derechos humanos y soberanía nacional, mienten hipócritamente cuando pretenden hacernos creer que se defiende la democracia, la libertad y los valores humanitarios. El conflicto es por definir un mundo unipolar o uno multipolar y Rusia nuevamente combate y defiende, aunque no nos demos cuenta, a la humanidad y nuestro derecho a vivir en paz. La posibilidad de que se construya una sociedad mundial más justa, dependerá de lo que hagan Rusia y China, por ello nosotros debemos respaldarlos y solidarizarnos con ellos.
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