*Se quejan de oídos sordos del Gobierno Federal.
Encabezadas por Pedro Martínez Coronilla, representante del Movimiento Antorchista, unas 50 jefas de familias nuevamente protestaron con un cacerolazo en la sede local de la Secretaría de Bienestar para exigir un programa alimentario para las familias de escasos recursos afectadas por la pandemia.
Hicieron sonar sus cacerolas en las inmediaciones de la dependencia como señal de que los hogares mexicanos registran escasez de alimentos y, en la emergencia sanitaria por la enfermedad pandémica covid-19, no han recibido apoyo gubernamental menos del Gobierno federal.
Martínez Coronilla denunció que los funcionarios representantes de la dependencia se ha mostrado insensible y de oídos sordos ante las exigencias de las familias que no cuentan con ingresos fijos como consecuencia de la estrategia del presidente, Andrés Manuel López Obrador, para mitigar la pandemia.
"Nuevamente venimos aquí para exigirle al Gobierno federal que se sensibilice y apoye a todas las familias duranguenses, exigimos que el presidente cumpla su palabra y sobre todo su obligación de garantizar bienestar a todas las familias que se encuentran en la marginación total", expresó.
Aseguró que quienes han apoyado han sido el gobierno estatal y municipal con la entrega de apoyos que no son suficientes, pero que de todos modos para muchas familias representan un alivio en la economía familiar.
Agregó que no solamente exigen los apoyos para las familias que militan en esta organización social, sino para todos los duranguenses en el desamparo que viven en la periferia de esta ciudad capital.
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