El diputado Vicente Onofre, de extracción morenista, lleva ya cuatro años ocupando el cargo en la Cámara de Diputados representando al distrito 33. Durante este tiempo poca ha sido la presencia del diputado en los tres municipios que pertenecen a este distrito (Chalco, Cocotitlán y Temamatla); durante la campaña para su reelección visitando las comunidades de manera activa, pero una vez que logró el triunfo no se ha vuelto a saber de él en las comunidades.
En días recientes, se han observado pintas en el municipio de Chalco, así como algunas vinilonas donde se anuncia su informe legislativo, pero aquí la pregunta es, ¿De qué se tratará el informe?
El primer punto que se aprecia en su propaganda es el de:
“12 iniciativas de ley y de decreto presentadas” (seis como diputado iniciante y seis de grupo parlamentario).
Cierto que los diputados son los que deben presentar estas leyes y decretos, pero de nada sirve el simple hecho de presentarlas si es que no se les da seguimiento y más aun de nada sirve si estas leyes no ayudan a los habitantes del distrito que representan; es como si el médico detectara solo la causa de la enfermedad, la diagnosticara y no diera el tratamiento para atacar el malestar. Aunque dice que cinco han sido aprobadas, no se ven reflejadas en la vida diaria de quienes por él votaron. Al contrario, muchos de esos dictámenes afectaron de manera severa la vida ordinaria de todos los mexicanos.
El segundo punto es “62 sesiones ordinarias realizadas”, de estas dice que asistió a 61 y una ausencia justificada, pero estas asistencias no deberían ser un logro y menos una meta para cualquiera de los diputados, eso es una obligación que debe cumplir cualquier diputado porque para eso se les paga y no las debería de nombrar siquiera, pues para eso se candidateo para ocupar el puesto, para eso fue elegido y para eso se les paga.
El tercero dice “172 leyes, decretos y puntos de acuerdo aprobados”, refiere que realizó 172 votos por convicción y principios. Nótese el cinismo: el seños diputado debió y debería de haber votado por el interés de los que dice representar y no solo por sus intereses personales, hay que tener presente que muchas de las leyes y decretos siguen afectando de manera servera a toda la población mexicana, pues sigue sin haber un verdadero apoyo al sector salud, que ayude por ejemplo a los enfermos de cáncer o VIH; sigue sin haber un auténtico apoyo a la educación: las escuelas públicas carecen de buena infraestructura, de buen mobiliario, de condiciones óptimas para el desarrollo intelectual e integral de niños y jóvenes estudiantes; no hay apoyo al campo, las zonas de Cocotitlán y Temamatla carecen de todo apoyo al campo, se deja a su suerte a los campesinos, ni siquiera se les entregó un costal de fertilizante.
Así es como podemos ver que Vicente Onofre, el diputado de filiación morenista, no trabajó para etiquetar recursos para ninguna obra ni ningún servicio de los mexiquenses a los que dice representar, y es que él, junto con sus cómplices morenistas, volvieron a dejar sin obras y servicios a los tres municipios de su jurisdicción.
Lo que sí vemos es que promueve de manera muy activa a su agrupación “Nuevo espacio”. Es evidente que si realiza tanta promoción a esta agrupación es porque la jornada electoral cada día se acerca más, ¿No será que nuevamente quiere postularse como candidato a la presidencia municipal de Chalco? Ojalá que no se le ocurra, ni de broma, pues seria mucho cinismo que después de haber estado al frente del Ayuntamiento y cuatro años en la Cámara de Diputados con cero resultados para la gente.
Hago un atento llamado a todo los chalquenses: no se dejen engañar; analicemos de manera correcta las acciones que el diputado Vicente Onofre ha realizado. Revisemos su pagina de Facebook y nos daremos cuenta que no realiza trabajo de campo, no visita las comunidades, no conoce las necesidades de la gente del distrito por el que fue electo. Él, al igual que el presidente Andrés Manuel Lopez Obrador, no trabaja y no trabajará para los pobres de México.
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