La mañana del 10 de enero de 2020, fue un episodio negro en la historia de Torreón, Coahuila y México en general; cerca de las 8:20 de la mañana, al llegar a su salón de clases un niño de 11 años pidió permiso para ir al baño y cambiarse; lo que ocurriría mininutos despues quedó marcado en la historia del estado.
Al tardarse más de 15 minutos en regresar, su profesora fue a buscarlo. Cuando sale del baño, el estudiante vestía un pantalón negro con tirantes y portaba dos armas de distinto calibre. El niño le disparó a su profesora, hirió a cinco estudiantes más y a un profesor de educación física. También se disparó y se quitó la vida.
Se piensan en tiroteos estudiantiles o masivos, primordialmente, una vez que cuatro o más personas mueren en un solo acontecimiento. Aquel tipo de incidentes, más que nada esos en los cuales está implicado un enorme conjunto de víctimas, acaparan la atención de las políticas locales y nacionales remarcando la atención de el valor de más grandes medidas de estabilidad.
Desde entonces las alarmas en todo el país se volvieron a encender ante el peligro de estas conductas violentas, sin embargo ese fue el ultimo hecho registrado de este tipo, pues un mes despues llegó el confinamiento por la pandemia de covid-19 y el virus Sars-CoV-2, la cual hizo que niños y jóvenes estuvieran en sus hogares cerca de dos años con clases a distancia o en linea; a partir del ciclo escolar 2022-2023 fueron todos los planteles educativos en el país en su mayoria que regresaron a clases presenciales, por lo tanto, regresó la convivencia entre las diferentes comunidades estudiantiles, pero ello vino acompañada con una carga exesiva de estrés acumulada durante su estancia en casa, depresión, ansiedad y un sinfín de actitudes relacionadas con la salud mental.
Estados Unidos (EE. UU.) sufre un grave problema con los tiroteos en las escuelas, situación que parece comenzar a cruzar las fronteras de la nación norteamericano y a reflejarse en otras piezas de todo el mundo de la misma forma que lo es su vecino, México. Según datos del Documento de Maltrato Armada , en lo cual va de este año se han sucitado 254 tiroteos masivos en EE. UU. No obstante el perpetrado el pasado 24 de mayo en una primaria de Uvalde, Texas, donde fallecieron 19 chicos, pareció marcar un parteaguas en el territorio norteamericano y en el nuestro.
A raíz del ataque donde un adolescente de 18 años abrió fuego en una escuela con la que aparentemente no poseía ni una interacción; varias amenazas de tiroteo han sido registradas en escuelas de México en este 2022. Los jóvenes, una y otra vez, permanecen intentando encontrar maneras de identificarse o marcar la diferencia en el planeta, por lo cual los tiroteos en EE. UU. serían parte de una predominación social o descomposición de esta.
Morir en un salón de clases
Para los padres y madres de familia, el último lugar donde pensarían que podría morir uno de los hijos es la escuela, para los docentes y estudiantes, el último lugar donde podrían pasar sus últimos momentos de vida es en un salón de clases; el lugar que por décadas se ha considerado seguro y como una casa de estudios, se está viendo atentada y en un verdadero peligro.
La historia de tiroteos en Estados Unidos, se remonta al 18 de mayo de 1927, murieron 45 personas en una masacre en una escuela del estado de Michigan. Por un atentado con explosivos; la mayor parte de ellas, eran estudiantes de primero a sexto nivel. 72 años después, famosa como la Masacre del colegio de Littleton, quedó, por otro lado, grabada a fuego en la memoria de todo el territorio. Dos estudiantes de los últimos años, Eric Harris y Dylan Klebold, asesinaron, en casi una hora del 20 de abril de 1999, a 12 estudiantes de entre 14 y 18 años de edad, a un instructor, y después se suicidaron.
La masacre se considera un modelo original de los ataques en escuelas, que incrementaron después de forma abrupta. El concepto "impacto Columbine" nace, ya que varios atacantes posteriores se inspiraron en esta brutal masacre. Y el término de "generación Columbine" es otro neologismo. Todos los estudiantes que nacieron a partir del 20 de abril de 1999, en EE. UU. , son calificados como de la "generación Columbine": chicos y adolescentes que no conocen un mundo sin tiroteos en establecimientos estudiantiles.
Hasta la actualidad se han registrado 925 incidentes con disparos en colegios en los Estados Unidos en 10 años: 509 son tiroteos, el 24 de mayo de 2022, un asaltante irrumpió en una escuela de la ciudad de Uvalde, en Texas y mató a por lo menos 19 menores y 2 maestros. Con este, son ya 49 los tiroteos en escuelas e institutos que han tenido sitio en 2022 a lo largo del territorio, según Gun Violence Archive, un documento que cuenta y califica los incidentes con armas de fuego en los Estados Unidos; con este episodio, 2022 se convierte en el segundo año con más muertos en tiroteos en escuelas e institutos: un total de 36 fallecidos al 25 de mayo, al mismo tiempo el único año que supera esta cifra es 2018, cuando fallecieron 50 personas en 77 tiroteos escolares, además, desde 2014 hubo, al menos, 509 tiroteos en los Estados Unidos, que dejaron 217 muertos y 453 heridos.
Historia de tiroteos en escuelas de México
Al ser el estado vecino con Estados Unidos, México no se ha visto aislada del hecho, cuesta pensarlo que en un país donde predomina un poco más la cultura de respeto y valores sucedan hechos como en Estados Unidos, pero lamentablemente si hay una lista de tiroteos en México; no es tan larga y sangrienta como la del país norteamericano, pero significa inseguridad en nuestro país.
Torreón, Monterrey y CDMX: los tiroteos escolares que han estremecido a México en los últimos años, como hemos referido en esta investigación que las balaceras al interior de planteles escolares son un fenómeno que se asocia casi exclusivamente con los Estados Unidos, en México también se han presentado algunos casos.
El más reciente de los tiroteos, que consternó a la opinión pública fue el que se registró el viernes 10 de enero de 2020 en las instalaciones del Colegio Cervantes, ubicado en Torreón, Coahuila. José Ángel Ramos Betts, un estudiante que cursaba sexto de primaria, llevó dos armas a su escuela, asesinó a su maestra, dejo seis heridos más para pasar a suicidarse con el arma que había conseguido por medio de su abuelo.
El 18 de enero de 2017, al interior de un aula de la escuela Americano del Noroeste, en Monterrey, Nuevo León, ocurrió un acontecimiento muy semejante: un alumno de 15 años sacó un arma en plena clase y abrió fuego contra la maestra y otros 3 compañeros de su salon. Luego, cargó la pistola nuevamente y la accionó contra sí mismo, perdió la vida horas después en el nosocomio. El 25 de marzo de ese mismo año en la alcaldía Azcapotzalco, en la Ciudad de México, un hecho entre dos estudiantes del Conalep 106 con una pistola calibre 22 generó un accidente al momento de que el portador del arma le enseñaba el objeto a su amigo.
En mayo de 2014, un estudiante de tan sólo 15 años disparó y mató a uno de sus compañeros de clase, con quien mantenía una pelea dentro de la Escuela Secundaria 574, Gustavo Baz Prada, ubicada en el municipio de Atizapán, Estado de México.
También hechos no meramente contra los estudiantes, pero si dentro de las escuelas con armas de fuego se han presentado, como por ejemplo el 13 de junio de 2007, un padre de familia ingresó armado al colegio privado Winston Churchill School, ubicado al sur de la Ciudad de México, para disparar en el rostro de la directora de preescolar, Carla Jiménez Baños, causándole la muerte. Supuestamente el asesino reclamaba una violación a una menor. En 2015 en el estado de Puebla un alumno de la Telesecundaria Niños Héroes de Chapultepec le disparó a un maestro por la espalda, hiriéndolo en el hombro; y en 2001, un adolescente de 14 años se quitó la vida de un balazo en la cabeza delante de sus compañeros de clase en la Ciudad de México. A todos estos hechos cabe señalar que en la época donde el crimen organizado tuvo su mayor auge, es decir, en el sexenio de Felipe Calderón en el norte, los estudiantes vivían hasta cierto punto con balaceras al día, hasta el grado que tenían que realizar simulacros por si llegase a presentarse una de estas batallas de balas, muy diferente al sur donde por ese sexenio se realizaban simulacros por sismos u otros fenómenos naturales.
Seguridad Publica actual de México
La primera amenaza de un tiroteo en México este 2022 se dio a conocer el pasado 31 de marzo, donde un estudiante del colegio secundaria y de bachilleres "Miguel Alemán González", ubicada en Coatzacoalcos, Veracruz, solicitó a sus compañeros no ir al plantel ya que haría un tiroteo.. Tras la masacre en la primaria de Texas, tan solamente 2 días luego se registró otra amenaza ahora en la Ciudad de México, ubicada en la alcaldía Venustiano Carranza, amagó con hacer un tiroteo por medio de una secuencia de fotografías donde muestra una arma de fuego.
En total han sido 13 las alarmas de tiroteos en centros escolares, la mayor de ellos ubicados en la ciudad de Torreón, Coahuila, donde han sido 7 los avisos de estos hechos delictivos, que todos tienen en común que fueron planeados o avisados por estudiantes, al respecto no es un hecho aislado, pese a que, contrario a EE. UU., en el país no está permitida la libre comercialización de armas y su adquisición en jóvenes. Por tal razón, se ha recurrido a la revisión de mochilas y la suspensión de clases de manera temporal.
Sin embargo, es importante señalar en la investigación el panorama actual en cuanto a seguridad pública, una de las amenazas más graves que está padeciendo la población que habita en los Estados y municipios mexicanos es, por una sección, el incremento de la inseguridad y la violencia expresada, entre otras incidencias delictivas, en la escandalosa cifra de asesinatos dolosos que cada día reportan los informes oficiales y, por otra, la ilusión de que todo se va a solucionar por medio de la utilización de las fuerzas armadas en un número variado y creciente de ocupaciones.
En lo que va de 2022, ya son siete las amenazas en escuelas de Torreón, siendo la primera reportada el 8 de marzo en la Universidad Autónoma de La Laguna. La segunda fue el 9 también de marzo en el CETis 59, luego el 13 de junio en el Colegio Valladolid, el 28 de septiembre en el Instituto Patria, además del 6 de octubre en la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro, el 18 octubre en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Autónoma de Coahuila y la del 11 noviembre en el Colegio América.
Partiendo del hecho de que la región tiene el antecedente ocurrido en 2020, cobra mayor relevancia las siete alarmas de tiroteos, pues deja al descubierto todo un sistema donde la seguridad pública no hace sentir protegido a los ciudadanos, pues es preciso mencionar que los tiroteos en nuestro país ocurridos hasta la fecha, no se han presentado en la misma dimensión que con Estados Unidos, pero si en el tema estudiantil han ocurrido hechos que han estremecido a la nación, como la desaparición de los estudiantes de la Normal rural de Ayotzinapa en 2014.
Es de manera urgente que se implementen políticas públicas por parte de instancias como la Secretaría de Educación Pública (SEP), que no sólo atiendan, sino que expliquen por qué ocurren este tipo de eventos para terminar con ellos, pues al final son un fenómeno; debe haber preparación entre el personal docente para la acción y prevención de un tiroteo, que va desde la atención de la salud mental, la prevención del acoso escolar y las acciones durante el hecho.
En el contexto mexicano no se tiene la preparación para enfrentar un tiroteo al interior de los planteles y es por ello, que estos hechos que se han presentado en el año deben significar de mayor relevancia para las autoridades, antes de que influenciados por la gran inseguridad del país esto se vuelvan tan común como en nuestro país vecino.
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