México ocupa uno de los últimos lugares educativos de los países miembros de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos, en 2018 se colocaba en el último lugar y un reporte reciente ubica a México con uno de los porcentajes más bajos de alumnos inscritos en el nivel media superior, es decir, nuestro país está mal en educación en los dos pilares básicos; el cualitativo y el cuantitativo. Los resultados del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA), señala a México con un retroceso en aprendizajes de lectura, matemáticas y ciencias. La educación que se brinda en nuestro país, no solo es de mala calidad, sino que además de ser deficiente, son pocos los que pueden acceder a ella.
Es por todos reconocido que la actual contingencia sanitaria ha traído como consecuencia un problema mayor a la educación y a la economía, ya que México, es un país sin una política clara de contención de la pandemia o de sostenimiento de la economía, que durante este período de contingencia sanitaria se han visto afectados ambos sectores. Nuestro país en las últimas horas sumó 815 nuevas muertes por coronavirus SARS-COV-2 y 12 mil 521 contagios, con lo que se acumulan un total de 3 millones 585 mil 565 casos y 272 mil 580 decesos de acuerdo con el informe de la Secretaría de Salud, muertes que según los expertos, pudieron ser evitadas. De estos datos vale la pena resaltar los 60,928 casos y 613 muertes corresponden a niños y adolescentes, dados a conocer por el Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA). Casos que han ido en aumento debido a las nuevas disposiciones del regreso a clases presencial.
Durante las dos primeras semanas de clases presenciales, de acuerdo con datos proporcionados por el doctor Hugo López Gatell se presentaron 9,041 casos de COVID-19 entre estudiantes de 5 a 17 años de edad, sin embargo, en la plataforma de registros de COVID-19, de la Secretaría de Salud y el Conacyt informa que las primeras dos semanas de septiembre se habían contagiado 17,526 niños y adolescentes, cifra que no coincide con la reportada por el doctor Gatell y que nos lleva a pensar y a preguntar ¿Cuál es la razón por la cual Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en conjunto con Hugo López Gatell y Delfina Gómez Meza, minimizan y ocultan información sobre los contagios en estudiantes en este regreso a clases presencial? Es obvio que el impacto de la pandemia sobre la actividad económica en nuestro país ha sido muy significativo. La magnitud y características de dicho impacto pueden identificarse en distintas etapas, acarreando grandes problemas a la economía. Por un lado, si tomamos en cuenta que, en este periodo de regreso a clases aún no está vacunada la mayoría de la población y tampoco los estudiantes menores de edad, los contagios por regresar a la línea de producción representan un peligro potencial para aquellos que regresen a dichas actividades y para la sociedad mexicana en general.
Para reactivar la economía de mejor manera, aunque resulte paradójico, hay que cuidar también la salud de los ciudadanos, garantizando la aplicación del biológico en el mayor porcentaje de la población, solo bajo esta condición se garantizarán las vidas y la economía de los mexicanos. Si esto no sucede, el regreso a clases presencial tan esperado por muchos puede representar una verdadera desgracia para el pueblo de México.
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