Indígenas de la comunidad de Santa María de Ocotán y Xoconoxtle del municipio del Mezquital, Durango, encabezados por el presidente del Comisariado de Bienes Comunales, Pablino Cumplino Reyes, y dirigentes del Movimiento Antorchista, se entrevistaron con el delegado de la Procuraduría Agraria (PA), Pedro Silerio Díaz, para plantear problemas agrarios.
Se trata de un convenio que se firmó en 1988 entre los comuneros de Santa María de Ocotán y del Ejido Unidad Campesina (del estado de Zacatecas) para la explotación mutua de madera en Ciruelillas (que es propiedad de Santa María).De acuerdo con los indígenas el convenio caducó hace varios años, sin embargo los ejidatarios de la Unidad Campesina no han querido abandonar el lugar.
El delegado de la PA se comprometió a iniciar un juicio para la suspensión precautoria tanto de la marca como de la posible tala de los pinos y, al mismo tiempo hacer un peritaje para definir las coordenadas de las mojoneras y la línea limítrofe entre la comunidad y el ejido zacatecano considerado como nuevo centro de población ejidal, pues existen riesgos de invasión por parte de este último.
Pablino Cumplido, presidente del Comisariado de Santa María, dio a conocer que los indígenas también se entrevistaron con autoridades de la Semarnat (Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales) entre ellos el jurídico y el titular de Aprovechamiento Forestal, quienes dijo- se comprometieron a consultar con sus homólogos de Zacatecas si ellos autorizaron explotar ahí y bajo qué criterios, situación que podría marcar el fin del conflicto.
Juan Pablo Muñoz Alderete, miembro del Movimiento Antorchista, dijo que su organización estará asesorando a la comunidad indígena y en cuanto se requiera un apoyo de otro tipo, estará ahí para poner todo lo que esté a su alcance para apoyar.
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